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Cómo prepararte para compartir tus lecciones de vida

Dios ha puesto un mensaje de vida dentro de ti

Al convertirte en creyente, también te convertiste en mensajero de Dios. Dios quiere hablar al mundo a través de ti.

Si piensas que no tienes nada que compartir, ese pensamiento es del diablo tratando de mantenerte en silencio. Tienes un depósito de experiencias que Dios quiere usar para traer a otros a su familia.

La Biblia dice: “El que cree en el Hijo de Dios acepta este testimonio” (1 Juan 5:10a NVI).

Lo siguiente te ayudará a prepararte para compartir: escribe las principales lecciones de vida que hayas aprendido. Gracias a que Salomón lo hizo tenemos los libros de Proverbios y Eclesiastés que están llenos de lecciones prácticas sobre la vida. Imagina cuánta frustración innecesaria podría evitarse si aprendiéramos de las lecciones de vida de los demás.

Aquí hay algunas preguntas para refrescar tu memoria y comenzar:

• ¿Qué te ha enseñado Dios del fracaso? (Salmo 51) • ¿Qué te ha enseñado Dios de la falta de dinero? (Filipenses 4:11-13) • ¿Qué te ha enseñado Dios sobre el dolor, la tristeza o la depresión? (2 Corintios 1:4-10) • ¿Qué te ha enseñado Dios a través de la espera? (Salmo 40) • ¿Qué te ha enseñado Dios a través de la enfermedad? (Salmo 119:71) • ¿Qué te ha enseñado Dios de la desilusión? (Génesis 50:20) • ¿Qué has aprendido de tu familia, tu iglesia, tus relaciones, tu grupo pequeño y tus críticos?

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