[Serie Máximo Gozo] Parados en las promesas de DiosMuestra

La práctica de orar en el nombre de Jesús

Hemos recorrido un largo camino. Hoy, hemos llegado a la tercera ola de principios de comunión. Las barreras que pueden impedirnos experimentar máximo gozo están en su apogeo. Nuestro mayor problema en el amar correctamente es nuestro propio miedo al rechazo y nuestro mayor problema en cuanto a aprender correctamente es no creer en el testimonio de Dios con respecto a Su Hijo. Nuestro problema más significativo en cuanto a vivir correctamente es el pecado que puede conducir directamente a la muerte.

Pero, cuando observamos que nuestros hermanos cristianos pecan, ya sea un pecado que conduce directamente a la muerte o no, tenemos la oportunidad de amarlos orando por su liberación del pecado en el nombre de Jesús. Eso es lo que Juan explica en 1 Juan 5:16-17.

“Si alguno ve a su hermano cometer un pecado que no lleva a la muerte, ore por él y Dios le dará vida. Me refiero a quien comete un pecado que no lleva a la muerte. Hay un pecado que sí lleva a la muerte, y en ese caso no digo que se ore por él. Toda maldad es pecado, pero hay pecado que no lleva a la muerte” (1 Juan 5:16-17). 

Esta promesa no se extiende a aquellos hermanos / hermanas que están cometiendo pecados que conducen directamente a la muerte. Todo pecado lleva a la muerte (Proverbios 11:19; Romanos 6:23; Santiago 5:20). Pero no todos los pecados conducen directamente a la muerte (envidia, mentiras, calumnias, chismes, orgullo, manipulación, ira, engaño, lujuria, hipocresía, por ejemplo). No dice que no podemos orar por eso, pero no hay garantía de liberación.

Cuando oramos por el hermano pecador, podemos estar seguros de que Dios responderá nuestra oración positivamente. Así, el nombre de Jesús se convierte en una "fuente de vida" tanto para el creyente pecador que obtiene larga vida más gozo como para el hermano que ora cuando se arrepiente y cuando recibe una respuesta positiva por su oración. Recibimos alegría de la oración contestada, y el hermano pecador recupera el gozo cuando regresa a la comunión (y potencialmente a una vida más larga).

¿Cuál es la "fuente de la vida"? La oración por nuestros hermanos abre la puerta a la fuente de la vida. Dios nos escucha, sabe todo sobre nosotros, conoce nuestras necesidades, conoce Sus promesas y el gozo que viene con la oración contestada. El amor perfecto de Dios nos llevará a vivir y experimentar máximo gozo.