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13 enero - Mirando al invisible para recibir nuestros imposibles

Hebreos 11:27 TLA “Moisés confió en Dios y, por eso no le tuvo miedo al rey ni se rindió nunca. Salio de Egipto, y actuó como si estuviera viendo a Dios, que es invisible.”

¿Qué es lo que sostuvo a Moisés? que él no veía sus circunstancias… él miraba al INVISIBLE.

Cuando nosotros dejamos nuestra vida pasada y le entregamos nuestro corazón a Dios, salimos de vivir de acuerdo a nuestras propias normas y nos entregamos a su voluntad. Muchas veces temeremos "la ira del rey": Habrá problemas, escasez, la gente te dirá maldice a tu Dios y muérete, se burlan de ti porque dicen: miren el o ella le sirven y cómo les paga Dios.

Nuestra mirada tiene que estar en el Invisible y no en las circunstancias, porque el Señor nos lleva a la eternidad, Egipto nos lleva a la esclavitud.

Moisés con todo el pueblo en su contra, se apoyaba, y se sostenía en Dios como “viendo al invisible”

Moisés no miraba la terquedad de Faraón (su jefe), ni la incredulidad de los judíos (sus amigos), tampoco miró la murmuración de su familia, ni su pasado violento. El sólo miraba al INVISIBLE ¡quítate esos lentes de incredulidad y ponte los lentes de la fe!

Hebreos 11:23 TLA “ Los padres de Moisés confiaron en Dios y, por eso, cuando Moisés nació, lo escondieron durante tres meses. El rey de Egipto había ordenado que se matara a todos los niños israelitas, pero ellos vieron que Moisés era un niño hermoso y no tuvieron miedo, porque confiaban en Dios.”

Lo normal es tener miedo, dejarse llevar por la corriente, pero cuando ves al invisible, no tienes temor, eres fuera de lo común, eres un hijo de Dios, un amigo del Espíritu Santo, eres extraordinario y vives confiando en Dios.

Hebreos 11:24-25 TLA “Moisés confió en Dios y, por eso, cuando ya fue hombre, no quiso seguir siendo hijo adoptivo de la hija del rey. 25 No quiso disfrutar de lo que podía hacer y tener como egipcio, pues era pecado. Prefirió que los egipcios lo maltrataran, como lo hacían con el pueblo de Dios.”

Moisés prefirió ser maltratado a disfrutar los placeres que le ofrecían, tu carne siempre va a querer alejarte de las cosas de Dios y no podemos ser carnales y espirituales a la vez.

No tengamos esa fe del consumismo que se basa en la cultura del tener más y más cosas, tienes fe para una casa, para un carro y sólo para cosas materiales, pero aún no has sido bendecido en otras áreas porque no estas alimentando tu fe en las cosas espirituales, sino sólo para tu carne que es acumular más en placeres momentáneos. 

El Espíritu Santo no puede morar y menos fluir en alguien carnal. 

Hebreos 11:26 TLA "En vez de disfrutar de las riquezas de Egipto, Moisés decidió que era mejor sufrir, como también iba a sufrir el Mesías, pues sabía que Dios le daría su premio.”

Pon tu mirada en el Dios invisible y verás imposibles. 

Ese galardón, es la recompensa por tu trabajo.

Moisés tenía la mirada en su recompensa por eso considero mejor sufrir que poseer los tesoros de Egipto. 

Hebreos 11:27 TLA “Moisés confió en Dios y, por eso no le tuvo miedo al rey ni se rindió nunca. Salio de Egipto, y actuó como si estuviera viendo a Dios, que es invisible.” 

Tu fe tiene que seguir firme y activa 

Moisés por su fe "salió" de Egipto, el no se quedo en sueños, intenciones, ideas, etc. 

La fe, cuando supera el temor, te da salidas. 

Hoy tu fe cobrara vida si pones tu mirada en el Invisible antes que en todo lo visible que esta a tu alrededor.

Tu fe puesta en Dios hace que IMPOSIBLES sucedan

Hebreos 11:33-34 TLA “Ellos confiaron en Dios, y por eso conquistaron países; y como actuaron con justicia, recibieron lo que Dios les había prometido. Cerraron la boca de leones y34 apagaron grandes incendios. Escaparon de que los mataran con espada, recibieron fuerzas cuando más débiles estaban, y en la guerra fueron tan poderosos que vencieron a los ejércitos enemigos”

Conquista reinos

Gobierna con justicia 

Recibe lo que Dios prometió 

Cierra boca de leones

Apaga llamas de fuego y escapa de la espada

Se poderoso en batalla y has huir a tus enemigos.