[Serie Libro De Vida] Dios Te Hizo EspecialMuestra

Tú eres especial

Lunes 

¡Otro mal día! Me senté con un grupo de compañeros de clase para almorzar, pero ninguno de ellos me habló. ¿Pasa algo conmigo?

¿Alguna vez te han ignorado o has sentido que nadie se preocupa de verdad por tus problemas? ¡Yo sí! 

Pero esto es lo que he aprendido: ¡Cada uno de nosotros es especial para Dios! El Dios Creador conoce todo acerca de nosotros y nos ama completamente. Él es el que nos dio vida. Nunca estamos realmente solos porque Él está siempre con nosotros. 

Eso suena sorprendente, ¿verdad? Para saber más, ¡comencemos por el principio de los tiempos!

En el principio de todo, Dios creó los cielos y la tierra, y durante los primeros días diseñó los ambientes donde los seres vivos habitarían: los mares y la tierra. Organizó los cielos con los astros. Luego comenzó a crear los diferentes seres vivos, de los colores, diseños y tamaños más sorprendentes, ¡desde minúsculos protozoarios hasta las grandes ballenas y aun los inmensos dinosaurios! De las plantas, ni hablemos. Dios diseñó un sistema especial para que las plantas, usando agua del suelo, nutrientes como minerales y la luz, pudieran fabricar su propio alimento por medio de la fotosíntesis. ¡Esto es sorprendente! Hasta el día de hoy nadie ha podido imitar un sistema de producción de alimentos similar. 

A cada ser vivo, Dios lo puso como parte de una cadena alimenticia, y como parte de un ecosistema. Con una función, con su propia forma de alimentarse, y además con su manera de reproducirse para que las especies se perpetuaran. Dios hizo el trabajo completo. Y se alegró de lo que vieron sus ojos, y dijo que era bueno. 

Pero Dios tenía en mente algo más, algo especial para Él. Dios quería crear al hombre a su imagen y semejanza. Lo formó del polvo y sopló aliento de vida en él. Luego hizo a la mujer como su compañera, así tendrían una familia. Luego Dios los bendijo con las siguientes palabras: «Sean fructíferos y multiplíquense. Llenen la tierra y gobiernen sobre ella. Reinen sobre los peces del mar, las aves del cielo y todos los animales que corren por el suelo». Y vio Dios todo lo que había hecho y vio Dios que ¡todo era muy bueno! El séptimo día, Dios descansó. 

Demos gracias a Dios por habernos dado un origen divino, nos creó y diseñó con cuidado y amor.