[Serie Nada nos separa de su amor] Dios nos ama profundamente Muestra

Dios nos ama profundamente a cada uno de nosotros

La Biblia afirma constantemente que Dios vela por todo el mundo, sin considerar la condición física o espiritual o el estatus social de la persona. Asimismo, la Biblia revela el amor y la preocupación especial que Dios tiene por todos aquellos que la sociedad ignora o excluye. Jesús mismo demostró este cuidado amoroso por medio de lo que enseñaba, hacía y cómo vivía.

Jesús vino al mundo para ser su Salvador, no su juez. No vino a condenar al mundo, sino a salvarlo. Jesús se hizo hombre, dejó todos los privilegios que tenía, su condición y tomó la forma de un siervo. No porque hubiera nacido esclavo, sino porque tomar forma humana era limitar su poder y su grandeza. No se aferró a lo que era, Dios, por amor a la humanidad. Se despojó de todo lo importante y grande de él, se hizo hombre para entregarse como sacrificio puro y santo, por el mundo entero. Su amor se manifiesta en ese nivel de sacrificio. No por los abrazos que te dé, ni las flores que te envíe, ni por los regalos materiales que te entregue, como un carro, dinero o una casa. ¡En absoluto! Muchos dan esos regalos, pero terminan dejándote, porque dicen que el amor se acabó. Las cosas materiales son pasajeras y eso no mide el amor de Dios. 

Cuántos millonarios en el mundo tienen grandes cuentas bancarias, abundantes propiedades, pero son infelices. Porque las cosas materiales no son la manifestación del amor de Dios, la manifestación del amor de Dios es su Hijo Jesucristo, que se hizo hombre, habitó en medio de la humanidad, se entregó como sacrificio perfecto para perdonar el pecado del hombre y proveer salvación. Ese es el verdadero amor. Él cargó el peso del pecado, por amor. En ese sacrificio estaba incluida cada persona, buenos y malos (dentro del concepto humano), pero que para Dios todos necesitaban su perdón y salvación, por cuanto todos pecaron. Ninguno es más bueno que otro. Delante de Dios, toda la humanidad es igual. Por eso fue necesario enviar a su Hijo, en el tiempo preciso. Dios no hace acepción de personas, él ama a todos por igual, de manera profunda y radical.

Reflexiona

La verdad del amor de Dios en ti es el perdón, la salvación y todo lo que abrió para ti en lo espiritual. Lo veremos los siguientes días de este devocional.