Año nuevo, Nuevas misericordiasMuestra

Sí, es verdad: Dios permanecerá fiel incluso cuando tú no lo seas, ya Su fidelidad se basa en quién es Él, no en lo que tú estás haciendo. 

2Timoteo 2:13: "Si somos infieles, él permanece fiel, porque no puede negarse a sí mismo". Este versículo describe una forma de vida radicalmente diferente, una que no es natural para la mayoría de nosotros. La mayoría de los seres humanos adquirimos una visión de la vida caracterizada por la perspectiva de "la vida está sobre mis hombros", "yo construyo o destruyo mi vida", "paga tu dinero y elige", o "no tienes a nadie a quien mirar o culpar salvo a ti mismo". En esta vista, tú eres el amo de tu destino. Tienes poco en qué confiar aparte de tus instintos, tu fuerza, la sabiduría que has acumulado a lo largo de los años, tu capacidad de anticipar lo que está a la vuelta de la esquina, tu carácter y madurez, y los dones naturales que te han dado. Es una forma de vivir aterradora de “tú contra el mundo”.

Pero tu bienvenida a la familia de Dios da un vuelco a todo esto. Dios no solo perdona tus pecados y te garantiza un asiento en la eternidad, sino que te da la bienvenida a una forma de vida radicalmente nueva. Esta nueva forma de vivir no consiste solo en someterse al código moral de Dios. No, se trata de que Dios se comprometa a ser fiel a ti para siempre, desatando Su sabiduría, poder y gracia para tu bien eterno. Piensa sobre esto. El que creó y controla el mundo, el que es la definición definitiva de lo que es amor, verdadero y bueno, y el único que tiene el poder de vencer finalmente el pecado, ha elegido, debido a Su gracia, envolver sus brazos de amor fiel y protección a tu alrededor, y Él no te dejará ir.

Puedes quitarte la vida de los hombros porque Dios la ha puesto sobre los Suyos. Esto no significa que no importa cómo vivas, sino que tu seguridad no se encuentra en tu fidelidad, sino en la de Él. Puedes confiar en Ėl incluso cuando no puedan confiar en ti. Él será fiel y bueno, incluso cuando tú no lo eres. Él hará lo que es correcto y mejor, incluso cuando tú no lo hagas. Y Él es fiel a perdonarte cuando la gracia convincente te revele cuán infiel has sido.

En lugar de otorgarte la licencia para hacer lo que sea, esta verdad debería darte motivación para continuar. Su gracia te llama a invertir en la única cosa que nunca se quedará corta, y esa única cosa es la fidelidad de tu Señor.