Un minuto después de su muerteMuestra

Buen objetivo

Apunta al cielo y tendrás la tierra 'por añadidura'. Apunta a la tierra y no tendrás nada. - C.S. Lewis

Lo que crees que pasa al minuto después de morir podría cambiarlo todo por siempre.

Imagina que crees que al morir tu alma se transformará en agua. ¿Cómo cambiaría eso tu forma de usarla? ¿Aún la dejarías correr al lavarte los dientes? Esta creencia puede cambiar tu interacción con el agua para siempre. Para prepararte, podrías mudarte a un lugar diferente para pasar más tiempo cerca de un océano, de ríos o lagos. Lo más probable es que también quieras cambiar la forma en que otros ven y usan el agua. Tal vez estarías tan inmerso en el agua que nunca pisarías la tierra, para experimentar y disfrutar de las personas y la vida que te rodea.

Piensa un poco en la cita anterior de C.S. Lewis. Si a cada parte de tu vida — acciones, gastos, tiempo y energías — se les asignara algún tipo de objetivo, ¿a dónde apuntarían? ¿lo harían a lugares distintos? Si todo ese impulso se sumara de algún modo, ¿a qué apuntaría tu vida?

¿Estaría tu vida tan orientada a hacer el bien y ayudar a otros que casi no habría tiempo ni energía para conocer a Dios? ¿Estaría tan dirigido a la iglesia y cumplir las prácticas espirituales que fallarías en amar a las personas que te rodean? Johnny Cash llamó a eso "tener una mentalidad tan celestial que no eres bueno en la tierra". ¿O tu brújula se enfocaría solo en las comodidades terrenales como buena educación, ropa, comida, transporte, un vecindario agradable y seguro, y una carrera significativa?

Note que nada de lo anterior es malo en sí mismo, por eso es tan fácil desviarse del objetivo.

Leeremos una charla entre Jesús y un importante líder religioso llamado Nicodemo, que trataba de entender dónde y cómo volver a apuntar su vida.

Ora: Dios, ¿comenzarás a mostrarme partes de mi vida que van en la dirección equivocada?

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