Un minuto después de su muerteMuestra

Tal como es

“El cielo no hace que esta vida sea menos importante; la hace más importante ”. -Billy Graham

Jesús se refirió al cielo como la casa de su Padre, donde hay muchas habitaciones, donde fue a preparar un lugar para nosotros. Si bien esta es probablemente una imagen simbólica de algo demasiado increíble para nuestra imaginación, debe ser una buena imagen, porque fue elegida por alguien que ha estado allí casi toda la eternidad. El cielo es más maravilloso de lo que podríamos imaginar, porque ¿por qué otra cosa haría Dios su hogar?

El cielo es el hogar de Dios, y es nuestro hogar, pero es mucho más que un montón de esquinas cerradas con perlas en las nubes. CS Lewis estaba escribiendo sobre el estado del cielo cuando escribió: "Dios no está en el espacio, pero el espacio está en Dios". ¿Eh? Básicamente, Dios no puede ser contenido por Su propia creación. El cielo es más que un lugar donde mora Dios; es un lugar completamente lleno de su calidez y maravilla. Y Jesús nos recuerda que Él también nos ha hecho espacio allí. 

¿Sabes cómo se siente llegar a casa? Finalmente puedes exhalar y simplemente ser. ¿Qué decimos cuando tenemos invitados? “Siéntete como en tu casa”. El cielo cumplirá ese sentido de hogar de una vez y por todas, pero también es mucho más que eso: es Dios en casa.

¿Qué significa todo esto para nosotros? Significa que el cielo es algo para lo que vale la pena esperar. Vale la pena correr la carrera y vivir una vida entera dirigida hacia donde Dios se ha convertido en su hogar. Significa más de lo que podríamos pedir, pensar o imaginar. 

Esto es lo que significa para tu día de hoy. Cuando lea la Oración del Señor que se encuentra en Mateo 6: 9-13, permita que la inmensidad del hogar de Dios le recuerde el poder en esta oración. Al repetir las palabras de Jesús y pedir que se haga la voluntad de Dios en la tierra como en el cielo, piense en las cosas que están fuera de control en su vida, su familia, su comunidad y el mundo en general. Entonces, recuerda cómo es en el cielo. Es completamente lleno por Dios mismo. Deja que tu inmensurable Padre, que ya ha hecho un hogar para ti en el cielo, consuma tus preocupaciones, tu dolor, todo lo que mides y todo lo que intenta medirte.

Ora: Dios, gracias por hacer un hogar eterno para mi alma en el cielo. Que se haga tu voluntad en mi vida hoy como en el cielo.