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GOZO EN JESUCRISTO

MEDITACIÓN

La anticipación es un tipo de alegría que es hermosa; como la anticipación de la Navidad, de un evento especial o de una persona que vamos a conocer. ¡Cuán indescriptible es el gozo, cuando lo que hemos estado esperando se convierte en realidad! María visita a su prima Elisabeth cuando ambas están embarazadas. Juan salta de alegría en el vientre de su madre, cuando ésta se encuentra con María, que está embarazada de Jesús. Esto era mucho más que anticipación; era la promesa del Salvador tan esperado a punto de cumplirse. Jesucristo, el Salvador del mundo, estaba a punto de nacer.

El gozo es el tema más recurrente en el nacimiento de Jesús. Él viene al mundo y los ángeles anuncian “las nuevas de gran gozo” a los pastores. Los Reyes Magos ofrecen sus regalos con gozo. El viejo Simeón se regocija cuando finalmente ve al Salvador con sus propios ojos. El Evangelio significa mensaje de gozo, porque proclama a Jesucristo, la fuente de todo gozo. Pero no sólo esto: Jesús es también el objeto de la alegría. Él mismo sacrifica su vida en la cruz por nosotros. En griego, la palabra alegría («chara») se deriva de la palabra gracia («charis»). Por ello, el gozo y la gracia están íntimamente relacionados. Jesús murió por nosotros y Dios nos ha mostrado misericordia, por eso, nos regocijamos y le damos gracias.

Existe el peligro de olvidar el gozo que tenemos en Jesús, después de años caminando en la fe de Jesucristo. El bebé en el vientre de Elizabeth fue tocado por el encuentro con Jesús. Dios se hace hombre, se entrega por completo. Él muere por nuestros pecados, somos perdonados. Ya no tenemos que pelear por cómo llegar a ser libres. Ya no tenemos que sufrir por el pecado. Somos liberados por Jesucristo que nos salvó. ¡Qué don de gracia y qué motivo de gozo! ¡Aleluya! Por lo tanto, regocijémonos en este regalo todos los días.

PREGUNTAS PARA REFLEXIONAR

• ¿Alguna vez he aceptado, conscientemente, este regalo de gracia en Jesucristo?
• Cuando pienso en el momento en que abracé conscientemente el gozo en Jesucristo: ¿Qué sentimientos y pensamientos me provocó esto?
• Si por algún tiempo he estado caminando con Dios: ¿Todavía tengo gozo en la gracia que me fue dada por Jesucristo? Y si he perdido este gozo, ¿cómo puedo redescubrirlo?

MOTIVOS PARA ORACIÓN

• Que pueda redescubrir el gozo en Jesucristo.
• Que pueda ser completamente lleno del gozo de Jesús.
• Que muestre gratitud por el Evangelio y la gracia que Jesús me ha dado.

ORACIÓN SUGERIDA

Jesucristo, gracias por traer el gozo al venir a la tierra y al morir en la cruz. Gracias por el gran don de la gracia que llena mi corazón de alegría. Señor, ayúdame a abrazar conscientemente este regalo todos los días para que pueda estar lleno de tu gozo. Aunque cada día pueda tener muchos desafíos, aun así, me regocijaré por tú gracia. Ayúdame a recordar esto todos los días. Lléname con tu gozo. Amén.

Viviane Baud