Salmo 27. Buscando El Rostro De DiosSample

Históricamente, se cree que el Salmo 27 probablemente fue escrito en un momento apremiante de la vida de David. Los estudiosos de las Escrituras creen que este salmo fue compuesto mientras David huía de los celos asesinos de Saúl. A pesar de que David no había sido más que un siervo fiel al servicio de Saúl, éste último se consumía en celos y envidia frente al brillo y favor que David disfrutaba de parte del Señor. Por tal motivo, decidió quitarle la vida. Como puedes ver, querido lector, ésta era una situación de horrible injusticia personal.

Otros eruditos piensan que el Salmo 27 fue escrito cuando David huía de su hijo Absalón, quien había conspirado para tomar su trono. En todo caso, cualquiera que haya sido la situación, este salmo fue escrito en tiempos de angustia y adversidad.

Algo que me llamó profundamente la atención al estudiar este salmo fue encontrar en el versículo uno una alusión a Dios como luz, un título que está directamente relacionado con el Mesías. Y es precisamente en este conocimiento, en esta relación que David tenía con Dios, donde descansa su confianza y seguridad. Él no tiene miedo; manifiesta la convicción de su corazón: “¿De quién temeré? Si Jehová es la fortaleza de mi vida.” Así lo asegura David en su salmo.

¿No te parece esto maravilloso? Pensar que tú y yo, por la gracia de Jesucristo a favor nuestro, podemos tener con Él una relación como la que David tenía con Dios. "Quiero una intimidad ininterrumpida con mi Dios." Esto era lo que movía la pasión de David: “Que esté yo en la casa de Jehová todos los días de mi vida, para contemplar la hermosura de Jehová y para buscarlo en su templo” (27:4).

David no estaba hablando de dejar su trono para mudarse físicamente al templo de Dios. No, su corazón anhelaba algo que vio en el espíritu. Para David, tenía que haber algo más que la reunión de adoración del domingo. Sentía que había algo del Señor que aún no había obtenido, y no iba a descansar hasta encontrarlo. Para David, había un conocimiento, una gloria, un entusiasmo del Señor que aún no había visto. Por este motivo, buscaba a Dios, fuese cual fuese la situación que estaba viviendo.

Quizás él pensaba: "Quiero saber cómo es tener una comunión ininterrumpida con mi Dios. He conocido victorias, he sido liberado, he visto su mano obrar milagros, pero todavía anhelo algo más. Quiero conocer su carácter y amarle por quién es Él: un Dios inmensamente sabio, eternamente compasivo, abundantemente misericordioso e infinitamente recto."

¿Y tú? ¿No anhelarías conocer a Dios de esta forma? Si tu respuesta es afirmativa, tan solo pídelo al Señor, con la fe de un niño; es decir, con una fe que confía, espera y cree que esto pasará.

"Pero que pida con fe, sin dudar, porque quien duda es como las olas del mar, agitadas y llevadas de un lado a otro por el viento". (Santiago 1:6)

Y fianlmente, ¿Qué significa para ti que Dios sea tu luz y tu salvación en situaciones específicas de tu vida?