La edad no es un requisito para DiosSample
Hace unos meses escuché una predica que me hizo ver la historia del general Naamán de distinta manera. Déjame explicarte, siempre había creído que el personaje relevante era el general Naamán que enfermó de lepra, y es cierto, sin embargo, en la historia hay un personaje que tiene gran relevancia y en algunas ocasiones se pasa por alto.
La historia de la lepra de Naamán, nos narra 5 personajes que nos dejan una enseñanza cada uno, Naamán, general del ejército sirio que termina siendo transformado y sanado por Dios, Eliseo, un profeta de Dios cuya fe es admirable, el rey de Israel, cuyo miedo impidió que creyera en Dios, Giezi, el criado del profeta Eliseo, quién no estaba satisfecho ante la presencia de Dios y deseaba las riquezas de este mundo y por último tenemos a la sierva de la esposa de Naamán, la cual era una joven de la tierra de Israel.
De este último personaje me encantaría hablarte. Ella era una joven cautiva de la tierra de Israel que se quedó al servicio de la esposa de Naamán (general del ejército sirio). No sé cómo se la haya pasado lejos de su familia o amigos, pero ella tenía dos opciones de enfrentar las circunstancias.
- Ella podía haber perdido su confianza en Dios y abrazado las costumbres de los asirios, ya que al final de cuentas ahora todo su contexto le hablaba de Asiria y nada de Dios.
- Ella podía permanecer firme ante sus creencias y valores y saber que todo está bajo el control de Dios.
Así como ella tenía dos opciones de actuar, también nosotros tenemos dos opciones de responder ante circunstancias difíciles, podemos elegir abandonar nuestras creencias y confianza en Dios o seguir confiando en Él.
Esta joven nos demuestra que su fe en Dios era tan grande, que fue capaz de ayudar a sus enemigos, a las personas que le cambiaron su vida por completo, y sobre todo les compartió a Jesús, ya que el general Naamán después de ser sanado reconoció que el único Dios era el de Israel.
Así como la vida de esta joven en un momento cambio radicalmente, su lugar donde vivía, las personas con las que se rodeaba, las creencias que escuchaba, todo su entorno físico cambió, sin embargo, hubo un aspecto que no cambió y Dios no permitió que cambiará y fue su fe en Él, ya que este mundo podrá ponerte en circunstancias difíciles, te podrá alejar de tus seres queridos, derrumbar tus sueños, llegar a tu puerta enfermedades, pero nadie ni nada podrá quitarte tu fe en Dios, ya que eso es personal y tú eliges si permanece tu fe en Dios o se quiebra.
Mi deseo en este día es que permanezcas en la fe, sin importar las circunstancias que estés pasando, que seas capaz de perdonar y ayudar a todos, y si ves a la persona que está a tu lado con alguna necesidad, entonces sé el portavoz de Dios y comparte a tu amigo Jesús. Amén.
Scripture
About this Plan
A menudo la sociedad nos clasifica por nuestra edad, en algunas ocasiones nos hacen sentir inexpertos o demasiados grandes. Sin embargo, para Dios no importa la edad que tengas, para Él solo importa que tengas un corazón dispuesto para servirle.
More