Contemplando a JesúsSample

Yo creo que para este día tu idea o concepto de contemplación ha cambiado bastante.

Me gustaría que el día de hoy lo leamos detenidamente. Y principalmente quisiera que supiéramos lo que significa esta palabra. Contemplación es: consideración, atención o miramiento que se guarda a alguien.

Quisiera que pusiéramos en nuestra mente ese lugar, persona u objeto que consideramos como algo muy hermoso, pensemos en la manera en la que llegamos a admirar esto. Pondré como ejemplo una obra de arte; la forma en la que detenidamente observamos cada detalle.

Una vez teniendo esto en mente quiero que juntos nos adentremos en el siguiente pasaje;

“Sólo una cosa le pido al SEÑOR; esto es lo que más quiero: habitar en la casa del SEÑOR por el resto de mi vida. Así podré disfrutar del placer de estar junto al SEÑOR y visitarlo en su templo.” Salmos 27:4PDT

Puedes buscar esto en la versión en la que más te agrade pero en lo personal esta fue la que más me llamó la atención a mí.

Creo que cuando consideramos a algo “hermoso” al mismo tiempo lo consideramos “importante” y por lo tanto queremos CONTEMPLARLO.

En otra versión menciona "… para inquirir en su templo” ¿que es inquirir? Es indagar sobre algo cuidadosamente. La que leíamos anteriormente dice “visitarlo”. En conclusión yo lo vería como “intimidad”. Lo visito en su templo, inquiero en él y por lo tanto tengo una intimidad con el Padre.

Y muchas veces hasta nos preparamos para realizar esa actividad que nos encanta o solo para admirar eso que nos es hermoso, y esto me lleva a Esdras: “Porque Esdras había preparado su corazón para inquirir la ley de Jehová y para cumplirla…”

Yo preparo mi corazón para inquirir y habitar en Él y que sus planes me sean revelados. Y cuando yo tengo una relación tan intima como que “habito” con Él en su templo, entonces me vuelvo un reflejo suyo.

En este día yo quiero invitarte a que tomes un tiempo de adoración, en donde no hayan palabras y solo puedas contemplarlo, donde solo anheles habitar e inquirir en Él. Yo oro para que tu corazón sea preparado para que juntos habitemos en su templo, que sus planes nos sean revelados, no perdemos el enfoque, sino que entendamos que somos un reflejo suyo y nos preparemos hasta que Él vuelva.

Montserrat Robledo