No Tengo NadaSample

“Me centro en ti te doy el primer lugar”

Como vimos anteriormente, todo comienza con un deseo. Acercarnos a Jesús y pasar tiempo con Él comienza siendo un deseo. El siguiente pasó de ese encuentro transformador es darle el primer lugar en nuestra vida, y esto suele dejar de ser un deseo para pasar a ser una decisión.

En la biblia hay multitud de historias de personas que decidieron darle el primer lugar a Jesús, creyéndole y dedicando su vida por completo a él. Para nombrar algunos ejemplos, basta ver la vida de Abraham, Jose, Moises, los discípulos de Jesús, el apóstol Pablo, entre otros.

Muchas veces con estas historias nos sentimos un poco lejos, ¿no? Por ejemplo al ver la historia de Abraham, un hombre que dejó todo para irse a una tierra que no conocía y no sabía qué le esperaba. O Pablo, que dejó de ser un militar ejemplar que perseguía cristianos para convertirse en uno de los máximos (sino el máximo) referente del cristianismo en la época.

Es lógico sentirnos lejos, porque la biblia narra historias de hombres y mujeres espectaculares. Sin embargo, el propósito no es hacerte sentir menos, ni que pienses que poner a Jesús en el primer lugar es sólo hacer grandes proezas como estos héroes de la fe.

Poner a Dios en el primer lugar comienza en el día a día, en cada pequeña decisión, pensamiento y acción. Jesús fue un día a la casa de Marta y María, y ahí podemos encontrar un claro ejemplo de cómo poner dar el primer lugar a Jesús. Marta se encontraba haciendo muchas cosas preparando todo lo necesario para recibir a Jesús como se debe (no la juzgues, es lo que todos haríamos) mientras que María se sentó tranquila a los pies de Jesús y escuchaba lo que él decía.

La clara demostración de cómo ante una misma situación podemos elegir entre poner primero a Jesús o no. Cuando Marta cuestionó la actitud de su hermana, Jesús le dijo que ella estaba inquieta por muchas cosas, pero que sólo una era necesaria, y era la que María había escogido.

Que en tu día a día puedas elegir primero a Jesús antes que cualquier otra cosa, y tomes la decisión de darle el primer lugar. Él te acompañará y te dará todas las cosas que como dice Mateo 6:33.