Grief Bites: Duda ReveladaMuestra

La duda es un lugar difícil y deprimente para estar y destruye lentamente nuestra comunión con Dios.

Espiritualmente es un "asesino silencioso" de nuestra alma.

La duda tiene muchos orígenes. Puede ser un mecanismo de defensa al no saber cómo manejar una situación difícil... un grito silencioso desesperado después de una mala experiencia que hayamos tenido en la vida... o una actitud arrogante de orgullo que nos hace creer que Dios nos debe más.

Podemos dudar que Dios quiera alguna vez trabajar realmente en nuestras vidas o a través de una situación difícil por la que estemos pasando... después de todo, ¿quiénes somos en comparación con Dios?

¿Y qué hay de los momentos en los que contribuimos a una situación difícil a la que nos estamos enfrentando, debido a decisiones imprudentes que tomamos en el pasado? ¿Dios nos deja atascados con nuestras consecuencias sin misericordia o perdón alguno a la vista? Para nada.

Es entendible tener sentimientos de duda después de que sucede una pérdida terrible. Toma tiempo aceptar una situación que ha herido su corazón o impactado su vida.

¿Y qué decir de los momentos difíciles en los que hay una pérdida injusta y que no ha sido nuestra culpa?

Dios trabaja en... y a través de... cada situación que enfrentemos. Nada toma a Dios por sorpresa. Él puede redimir cualquier circunstancia haciendo que se produzca algo bueno de ella.

Muchas veces, Él muestra Su misericordia mientras que nos deja ayudar a otros, que más tarde van a experimentar una experiencia de dolor o pérdida similar. Él nunca desperdicia una prueba, aflicción o sufrimiento... siempre y cuando sometamos nuestras aflicciones y dudas a Él.

Dudaba de Dios después de experimentar una circunstancia trágica y dolorosa. No podía entender porque Él permitía que eso pasara. La duda me afligía y me envolvía. No fue sino hasta años después que me pude dar cuenta el propósito que Dios tenía para permitir eso.

En circunstancias en las que algo malo sucede... Dios es muy paciente con nosotros. Él sabe que nos va a afectar... y Él es la respuesta para restaurar nuestra esperanza y fe.

Cuando usted se refugia en Él, Dios es fiel para guiarlo a través de las dudas que tenga y que pueda regresar a ese lugar de plena confianza.

En momentos donde nos sobrecargamos y nos molestamos porque Dios no hizo exactamente lo que pensábamos que era mejor, creo que eso es retar a Dios de manera directa.

Queremos lo que queremos... y nos molestamos porque Dios no cede a nuestros planes. Este tipo de duda es letal eventualmente para nuestra relación con Dios... y muchas veces, puede afectar nuestras relaciones con otros también. En estos momentos, debemos humillarnos rápidamente y arrepentirnos.

Es importante entender que Dios tiene un plan para cada y toda situación o aflicción que experimentamos o atravesamos.

Si Dios nos permite pasar por una situación difícil que nos hace dudar o una situación que nos amolda, podemos confiar en que Él tiene planes para aumentar la flexibilidad de las maneras en las que nos puede usar para Su gloria en el futuro.

Nunca es divertido experimentar eventos difíciles en la vida y en verdad pueden tratar de eliminarnos. Los retos de la vida pueden tentarnos a sentir resentimiento hacia Dios.

Debemos darnos cuenta y aceptar la verdad de que Dios quiere genuinamente lo mejor para nosotros y que la duda intenta alejarnos de lo mejor de Dios.

Dios ve el "panorama general" cuando nosotros no podemos. Cuando la duda nos tiente, usemos eso como señal para tener una conversación genuina y seria con Dios. Él en verdad hace que toda situación que enfrentemos, funcione para nuestro bien.

Pídale hoy a Dios que tome control de su vida. Dése a Él por completo. Derrame su corazón... comparta con Él todas sus dudas, sufrimientos, preocupaciones, frustraciones, desilusiones, miedos y fracasos. Pídale que le conceda sabiduría y le ayude a ver el propósito mayor para su duda y circunstancias.

Pídale que resuelva cualquier amargura en su corazón hacia Él, otros o cualquier situación. Dígale que le gustaría arrepentirse de su duda y comenzar a confiar en Él hoy. ¡Él tiene un corazón lleno de amor y misericordia por usted!