La Alegría de ServirMuestra

Mi Dios: Ángeles servidores

En el cielo todos trabajan. Jesús dijo una vez: “El Padre trabaja, y yo también trabajo”. Es decir, las tres personas del Dios trino no solo se esforzaron enormemente cuando diseñaron y crearon el universo, sino que trabajan cada día para mantenerlo y sostenerlo.

Los ángeles también trabajan. No sólo rondan en grandes nubes aladas, esperando a ver qué va a pasar, contemplando a Dios y mirándonos; son agentes espirituales de Dios, que hacen su benigna voluntad en nuestro favor. “¿No son todos espíritus ministradores, enviados para servicio a favor de los que serán herederos de la salvación?” (Hebreos 1:14).

Cuando diga sus oraciones esta noche y haga el inventario de lo que ocurrió en su día, y le pida a Dios que le ayude con las finanzas, la salud, la familia, el trabajo y el hogar, tome un momento para darle gracias al Señor por el ejército invisible de servidores que él envió y está trabajando en su favor, incluso mientras habla.

Quizás algunos le puedan contar sobre la orientación, los susurros y los codazos con los que lo llevaron a donde Dios quería. Quizás algún día le puedan contar sobre la protección a prueba de balas que ellos le dieron, contra el desastre y contra el maligno.