El viaje del legadoMuestra

Hierro con hierro de aguza

Creo que todo el mundo necesita un Pablo, un Timoteo y un Barnabas en su vida. Necesitamos mentores que compartan su sabiduría con nosotros. Necesitamos gente más joven que podamos enseñar y guiar. Y necesitamos compañeros que nos amen incondicionalmente y nos hagan responsables de las decisiones que tomamos.

En mi caso, cuento con 12 amigos que conforman lo que llamamos nuestro Grupo Aguila. Nos encontramos en mi oficina todos los miércoles por la mañana a las 7 am. ¡Y ese ha sido nuestro programa durante los últimos 14 años! Y le diré esto: si uno de esos tipos me dice algo, es casi lo mismo que mi esposa diciéndome algo. Así de importantes son estas personas para mi vida y mi caminar espiritual.

Escucho muchas voces distantes que piensan que Dios las llama para decirme lo que debo o no debo hacer, pero no les doy ningún valor. Realmente no me conocen, y no tienen una historia conmigo. Pueden tener grandes intenciones, pero no se han ganado el derecho de hablar en mi vida de esa manera.

Pero los hombres en mi Grupo Aguila son una historia diferente. Han invertido en mi vida durante más de una década, y he invertido en sus vidas. Hemos caminado mucho juntos, así que nos hemos ganado el derecho de hablarnos con la verdad.

Proverbios 27:17 compara ese tipo de relaciones con el hierro que afila el hierro. En los viejos tiempos, las personas afilaban sus cuchillos o espadas frotando dos cuchillas juntas. La responsabilidad hace lo mismo para las relaciones personales.

Si Dios no ha traído a las personas a su vida para que cumplan ese rol, comience a orar para que Él haga exactamente eso. Encuentre sus propias Águilas y aguce su hierro. El proceso puede no ser siempre divertido. De hecho, en ocaciones puede ser bastante doloroso. Pero vale la pena la incomodidad temporal porque hace una gran diferencia en nuestras vidas y nuestros legados.