Amando en VerdadEjemplo

Amor paciente

¡Dime cuánta paciencia te falta y te diré cuánto amor de Dios necesitas! Admito que, de todas las cualidades del fruto del espíritu, necesito más paciencia. Tal vez no sea casualidad que, entre todas las virtudes de ese pasaje de 1 de Corintios, la paciencia esté en el primer lugar como requisito de un verdadero amor.

Según el diccionario de la RAE, la paciencia se define como la capacidad de soportar algo molesto y penoso sin alterarse. También se refiere a la capacidad de esperar lo que deseas con calma y tranquilidad.

«Con la paciencia y la tranquilidad se logra todo… y algo más» -Benjamín Franklin.

Definitivamente, Jesús nos dio el mejor ejemplo de soportar y esperar con paciencia al cumplimiento de su obra redentora al mundo. Siendo el Dios omnipotente, no se adelantó a ninguno de sus procesos por lo que su Padre le instruyó que tendría que pasar. Tampoco trató a las personas con desprecio, creyéndose superior—aunque sí lo era. Para mí, esa paciencia fue una de las muestras más grandes de su amor por nosotros. Como bien dice Filipenses 2:6-8:

"El cual, siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse, sino que se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres; y estando en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz".

Si reconoces que estás actuando con bondad, que no eres envidioso, que no eres egoísta, que te gozas de la verdad, pero te hace falta paciencia, te invito a hacer la siguiente oración.

Oración: Señor Jesús, reconozco que debo crecer en la virtud de la paciencia. Dame un corazón amoroso y paciente como el tuyo, que ante la espera, las adversidades o interacciones con la gente, pueda yo permanecer tranquilo, confiando en tu soberana voluntad. En el nombre de Jesús, amén.