Ebenezer - Hasta Aquí Nos Ayudó Jehová 2.0Ejemplo

Reflexión Deuteronomio 7 - 8

Balaam fue un profeta al que se le pidió maldecir al pueblo de Israel, pero Dios, en su paciencia, lo utilizó para darse a conocer y mostrar a Balac, rey de Moab, el lugar que Israel ocupaba en su plan. Al observar las parábolas que Balaam pronunció, podemos notar cómo compara a Israel con Moab y la manera en que se expresa sobre Israel. Sin duda, este no era el mensaje que Balac esperaba escuchar.

Prueba de ello es que intentó tres veces, desde distintos lugares, obtener una maldición contra Israel. Estos lugares eran alturas desde donde se podía ver al pueblo y, según la creencia de Balac, era posible maldecirlo desde allí. Sin embargo, a Balac no le interesaba Jehová ni su palabra; su perspectiva era que Balaam era un vidente, alguien capaz de traer un buen augurio sin importar la procedencia del mensaje. Lo único que Balac quería era escuchar palabras que le dieran seguridad para luchar contra Israel.

Podemos ver en estos dos hombres un reflejo de nosotros mismos. Hemos sido llamados a compartir el mensaje del evangelio, pero también a escuchar la voz de Dios a través de su palabra, su iglesia y el consejo bíblico para transformar nuestra vida.

Te invitamos a reflexionar en esto:

• ¿Estoy siendo fiel al llamado que Dios ha hecho en mi vida, o me estoy distrayendo con cosas vanas?
• ¿Estoy realmente buscando la voz de Dios, o solo quiero escuchar lo que me conviene?

Medita en la aplicación que tiene sobre tu vida lo que has leído.