La Oración De CuaresmaEjemplo

Perseverancia... es una palabra anticuada para determinación, agallas, resolución, tenacidad y dedicación. Cuando escuchamos estas definiciones, se agita una fuerza dentro de nosotros. Esa «perseverancia» gusta mucha en las películas en las que el más débil prevalece y se convierte en el héroe.

La perseverancia requiere tiempo. Implica no darse por vencido cuando la fuerza parece escasear. Queremos entrar en una cadena de oración, que oren por nosotros, y eso es todo... somos maduros, hemos vencido y estamos avanzando y progresando en nuestra vida con Cristo.

El tiempo no es nuestro amigo en estos días. No tenemos que ser pacientes, porque el mundo está al alcance de nuestra mano. Santiago nos recuerda que la perseverancia es una lección que se aprende lentamente. Solo llega cuando resistimos la prueba del tiempo. Eso no significa que no hagamos nuestra debida diligencia. La espera está llena de ociosidad, golpeando la mesa con los dedos mientras espera. Sumérgete en la Palabra y pídele a Dios que resalte en la página las palabras y frases que traerán transformación a tu alma. Dedica tiempo a estar en su presencia. Habla menos y escucha más, y el momento en que pienses que no escuchas nada y que tu tiempo de quietud con él fue en vano... Espera un poco más. La única manera en que puedes errar cuando estás en silencio y a solas es irte muy rápido

¡Persevera hoy! Puede ser en pequeña medida o puede ser una hazaña abrumadora de fe. Usa tu oración guiada por la respiración para ayudarte a crecer en perseverancia.

Inhala: Todo lo puedo

Exhala: En Cristo que me fortalece.