Manejando mis deseos

Fuimos creados con emociones y sentimientos, lo cual nos hace tener deseos; así que todos contamos con anhelos, sueños y metas las cuales deseamos ver hechas realidad. Eso no desagrada a Dios, porque él tiene un plan perfecto para cada uno de nosotros. Sin embargo en ocasiones somos dominados por los deseos y tomamos decisiones incorrectas que nos llevan a cometer errores. La clave es que podamos dirigir nuestros deseos, y no que nuestros deseos nos dirijan.

Lo increíble de conocer a Jesús e incluirlo en nuestra vida, en nuestros planes, sueños, es que nos guiará a tomar mejores decisiones y nos ayudará a manejar nuestros impulsos. Esto nos permitirá ver hechos realidad los sueños y proyectos personales que en verdad serán de bendición para nosotros.

• ¿Has tomado decisiones siendo manejado por tus impulsos o deseos?
• ¿Cuáles son tus planes y metas? ¿Qué lugar tiene Jesús en ellos?
• ¿Estarías dispuesto a incluir a Jesús como la base de tus sueños y proyectos? ¿Aunque eso implique dejar que Él haga su voluntad en ellos?

Te invitamos a orar: Señor Jesús reconozco que te necesito en mi vida, te pido entendimiento sobre tus planes y sabiduría para caminar en ellos. Renuncio a mis planes y deseos personales. Que tu gracia y favor me acompañen para alcanzar el destino que tienes para mi. Ayúdame a dominar mis deseos y que tu carácter sea reflejado en mi. Confío en que mi futuro está seguro en tus manos y la verdadera plenitud de todo lo que pueda experimentar está en ti. Amén.