¿Cómo Escuchar La Voz De Dios?Muestra

“Poco después, Jesús les dijo a sus discípulos:—No se preocupen. Confíen en Dios y confíen también en mí” (Jn. 14:1 TLA).

Mi Señor y Salvador Jesucristo: Gracias porque al conocerte, me enseñaste el camino a la Cruz donde puedo llevar no solo mis pecados, sino mis temores, preocupaciones, angustias, dolores, enfermedades y decepciones.

Son muchas las veces que pretendo ser fuerte, pero estoy muy débil, lucho por tener éxito y me topo con el fracaso, procuro mantenerme saludable y aparece algún quebranto; y en cada ocasión donde has probado mi fe, es Tu poder y Tu gracia la que me levanta, me anima y no deja que me rinda.

Qué regalo más valioso es cambiar mi angustia por Tu paz. El poder creer en Tu amor y poder a mi favor, contrasta con este mundo lleno de dolor, preocupación, muerte y zozobras.

Jamás prometiste que los problemas desaparecerían, ni que el camino fuera fácil; Tu promesa es estar siempre conmigo, tanto en mis angustias y dolor, como en el descanso y la victoria.

Gracias Dios por permitirme creer en Tu absoluta soberanía, Tu fidelidad inmutable y Tu maravilloso amor.

Señor Jesús, Tú eres quien ha muerto por mis pecados y resucitaste para justificarme; eres tú El que vive por siempre para interceder por mí. Tú eres el gran Yo soy, el mismo ayer, hoy y siempre. Tú eres el que ha de venir de nuevo y estarás para siempre conmigo.

En tu precioso nombre Jesús, amén

Tiempo de escucha en Dios:

Pídele al Espíritu Santo que te ayude a dejar de lado las distracciones y la ansiedad (1 Pedro 5:7).

Esperad en silencio (Santiago 1:5).

Lee las Sagradas Escrituras si tu mente divaga (Salmo 100).

Escribe ideas, imágenes y pasajes bíblicos que te vengan a la mente (Salmo 66:16).

Comparte la inspiración con un amigo de confianza o un compañero de oración (Salmo 96:2-4).