¡No Más Miedo!Muestra
El miedo nos engaña cuando lo que deseamos o lo que tememos es más valioso para nosotras que Dios.
El miedo nos engaña porque tomamos personal todo lo que nos ocurre. Déjame explicártelo mejor: si bien es cierto que tenemos miedo a las consecuencias o a lo que sucederá cuando pecamos, también es cierto que ese temor viene en forma de personas. Dios usa a las personas para bendecirnos, pero también para santificarnos.
Por ejemplo, un jefe que te despide, una madre que te grita constantemente, un padre que golpea la pared cuando se enoja, un novio alejado de ti, una amiga que ya no te escribe, un pastor que te ha pedido una cita después de que viste a un hermano hablar con él, un número desconocido en tu celular. Seguro puedes pensar en muchos más, pero se trata más de cómo nos engaña el miedo:
1.Cuando atenta contra nuestros ídolos.
2.Cuando atenta contra nuestra identidad.
3.Cuando atenta contra quién es Dios.
4.Cuando intenta culpar a otros.
Nuestros ídolos son la comodidad o nosotras mismas, también el dinero o todo lo que nos gobierna, por lo que solemos temer ante la incertidumbre de perderlo. Lo mismo sucede con nuestra identidad, como el trabajo, el ministerio o una profesión. O si la razón y la perspectiva por la que atravesamos una situación se vuelve complicada, entonces tememos. En resumen, tememos si algo amenaza con quitarnos todo aquello que es importante o valioso para nosotras.
¡Esto es un grave engaño! El pecado que aún mora dentro de nosotras engaña a nuestros deseos para terminar sintiendo miedo: a perder el trabajo o una posición eclesiástica, miedo a que sepan que nos equivocamos o a que Dios responda como yo no quiero. ¡No podemos vivir como si no tuviéramos fe en Jesucristo! ¡Aquel que venció la muerte y resucitó para darnos vida en abundancia! No caigas en el engaño de tus pensamientos contrarios a la Palabra y tus ídolos: tener a Cristo es todo lo que necesitas para no temer. Corre a Él, pero no temas.
- Aprende: ¿Por qué el miedo nos engaña?
- Vive: Lee Proverbios 29:25 y salmo 27:1, ¿qué nos enseñan sobre el engaño del miedo? Ahora lee el salmo 34:4, ¿a dónde nos llama a colocar nuestros temores? Escribe los tuyos y ora al Señor este salmo.
- Lidera: En tus reuniones de discipulado y consejería puedes agregar una pregunta: ¿A qué le temes? De manera que conozcas más el corazón de la persona.
Oración
Amado Padre, gracias porque tu Palabra siempre llega a tiempo. Te pedimos que nos ayudes con todo lo que nos engaña a temer y a olvidar que te tenemos a ti y tu Palabra. Ayúdanos a vencer los miedos reconociendo que nos están gobernando. Recuérdanos que Tú estás de nuestro lado y Cristo ya ha vencido. Amén.
Escrituras
Acerca de este Plan
El miedo nos paraliza, pero la confianza en Dios nos lleva a la acción.
More
Nos gustaría agradecer a Reformadas por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: https://www.reformadas.com