Ser Luz Y SalMuestra

Brillando con propósito

Ser luz y sal no es solo para nuestro beneficio, sino para que otros vean a Dios en nosotros. Nuestras buenas obras no son para glorificarnos a nosotros mismos, sino para que las personas glorifiquen a Dios. Esto significa que debemos vivir intencionalmente, buscando reflejar el carácter de Jesús en cada situación. Desde actos de bondad hasta decisiones éticas, todo lo que hacemos puede ser un reflejo de Dios para el mundo. Nuestra luz y nuestras acciones deben apuntar siempre a Él, no a nosotros.
¿Que función cumple un faro en la costa? su propósito es guiar a los barcos de regreso a puerto seguro. No importa cuán fuerte sea la tormenta, el faro sigue brillando, mostrando el camino. De la misma manera, nuestras vidas deben ser como ese faro, ayudando a otros a encontrar su camino hacia Dios en medio de las tormentas de la vida.

Oración:
Padre, quiero que mi vida brille para que otros te conozcan. Ayúdame a vivir de tal manera que mis acciones dirijan a las personas hacia Ti y que puedan glorificarte a través de lo que ven en mí.

Acción práctica:
Realiza hoy una buena obra de manera intencional, no buscando reconocimiento personal, sino con el propósito de que otros vean la bondad de Dios en tu vida.