Viviendo en El DesiertoEjemplo

¿Alguna vez te has sentido solo, como si no hubiera nadie a tu lado? ¿Has orado, clamado a Dios y sentido que no hay respuesta? Es fácil quedar atrapado en nuestros propios sentimientos, permitiendo que el desánimo y la duda se filtren en nuestro corazón.

A menudo, nos enfocamos en cómo nos sentimos en lugar de recordar lo que es verdaderamente real. Dios no solo quiere que lo sientas; Él quiere que sepas con certeza que está contigo, que te escucha y que responde a tus oraciones, incluso cuando la respuesta no es evidente de inmediato. Su amor por ti es constante, inquebrantable, y nunca te ha dejado solo.

Dios conoce tus pensamientos, tus luchas y tus necesidades mejor que tú mismo. Él está completamente consciente de las batallas que enfrentas, y sabe exactamente lo que necesitas, incluso antes de que lo pidas. Puede que no siempre comprendamos Sus caminos o tiempos, pero podemos confiar en Su carácter y en Su amor eterno.

En este devocional, profundizaremos en la realidad de la presencia de Dios en nuestras vidas, recordando que, aunque nuestros sentimientos pueden cambiar, Su presencia es inmutable. Aprenderemos a confiar en Él y a descansar en la certeza de que Él está trabajando en nosotros y por nosotros, incluso en los momentos de aparente silencio.