5 Claves Para Enfrentar Los Desafíos DiariosMuestra

ICABOD

Ana cuidó al niño Samuel, el hijo varón que había pedido a Dios. Mientras él crecía en el temor de Dios y era instruido en el camino divino, contrastaba con los hijos de Elí, el sacerdote de la época, quienes carecían de conocimiento de Jehová.

Hay una diferencia entre no tener conocimiento de Dios y resistirse a conocerlo. Los hijos de Elí tenían el privilegio de conocer a Dios, pero optaron por resistirse y jugar con lo sagrado, creando una dualidad. Alternaban entre estar con Dios y con el enemigo. Al actuar así, perdían sensibilidad y llegaban a cometer acciones abominables ante Dios. Aunque Dios les advertía a través de Su gracia, su insensibilidad iba en aumento como sus pecados, y decidieron no oír la voz de Dios y desobedecer abiertamente. Es peligroso estar en el equipo de Dios y actuar en su contra, mostrando una creencia cristiana en apariencia mientras tus acciones van en su contra. A veces se piensa que no pasa nada, pero en realidad sí pasa.

La misericordia de Dios es ilimitada, pero al alejarse de Él, uno queda a merced del enemigo.

Los filisteos, enemigos de los israelitas, entablan una batalla y muchos israelitas pierden la vida. En el capítulo 4, nos refiere que el pueblo de Israel decide llevar el arca al campo de batalla. Creían que la protección de Dios estaría con ellos, costumbres que habían aprendido de los pueblos paganos. Mas sin embargo no era así, ellos creían en el arca como quien cree en un amuleto. Pierden la batalla.

La esposa de Fines; hijo de Elí, estaba embarazada al momento de ocurrir los hechos, se adelantó su parto se complico y antes de fallecer, llamó a su hijo Icabod, cuyo nombre significa "la gloria se ha ido". Este nombre tan trágico se debe a que el Arca del Pacto de Dios fue capturada por los filisteos, y tanto su esposo como su suegro, el sacerdote Elí, habían fallecido. Este suceso marcó un momento de gran angustia y desesperación para Israel, ya que la presencia del Arca representaba la gloria y protección de Dios para su pueblo.

En la cotidianidad, es posible que nos veamos ante situaciones en las que percibimos que la "presencia de Dios se ha desvanecido", instantes en los que nos damos cuenta de que nos hemos alejado de Dios a causa de nuestras decisiones y equivocaciones.

Existe un momento en la vida en el que es vital reflexionar sobre cuál es la falta de sentido en tu vida, cuál es tu rebeldía contra Dios. Ningún puesto de liderazgo, habilidad, ni cargo te rescatará. La gloria de Dios está ausente en tu vida.

El momento más triste no es cuando sientes que Dios te ha abandonado, sino cuando te alejas de Él.

Clave #1: Mantén siempre una relación con Dios basada en la obediencia y la integridad.