Caminemos con la PalabraMuestra

«Y el nacimiento de Jesucristo fue como sigue» (Mateo 1:18).

¿Por qué muere la gente?

Dios advirtió previamente a Adán que no comiera del árbol del conocimiento del bien y del mal «porque el día que de él comas, ciertamente morirás» (Génesis 2:17). Adán desobedece a Dios y muere (Génesis 5:5). Como Adán era nuestro representante, Pablo escribe: «Porque, así como en Adán todos mueren...» (1 Corintios 15:22). La desobediencia del primer hombre establece el principio de muerte para los vivos; por lo tanto, nuestro representante en el Edén le falló a la humanidad, lo que no ha dejado a nadie ileso.

Por otro lado, Jesús existió antes de nacer y luego vivió para morir, para que todos pudieran vivir. El orden de las palabras del texto griego en Mateo 1:18 coloca la palabra «Jesucristo» antes de «el nacimiento» porque Jesús, siendo Dios, vivió antes de nacer. Fue necesario el sacrificio del Hijo eterno de Dios para asegurar la salvación de aquellos que vienen a Él por medio de la fe. Los verdaderos sabios aún lo buscan (Mateo 2:1–11).

Aplicación: Busca sinceramente adorar al Rey Jesús.