Luces Brillantes, Gran CiudadMuestra

¿Alguna vez has dicho algo solo para sentir que nadie te escuchaba? Tal vez fue en tu grupo pequeño, en la mesa de la cena con tu familia o en una difícil conversación con un amigo. Si has pasado por eso, sabes lo mal que se siente. Cuando intentas hablar, pero nadie parece escucharte, te sientes rechazado, ignorado y sin importancia. Aunque no siempre puedes cambiar el hecho de que algunos no se interesen por lo que dices, sí puedes cambiar la forma en que respondes y escuchas a los demás. Cuando estés en posición de escuchar, apoyar e interesarte por otra persona, ¡hazlo! No solo porque no quieres hacerla sentir lo que tú has sentido cuando te ha pasado, ¡sino porque sabes que esto también forma parte de lo que significa seguir a Jesús! Como cristianos, a veces debemos ponernos a nosotros mismos a un lado por el bien de los demás. Eso forma parte de hacer brillar la luz de Jesús en el mundo, y es algo que podemos hacer simplemente en la forma en que apoyamos y estamos presentes para las personas que nos rodean.

¿A quién puedes dedicar tiempo en tu vida para escuchar esta semana? Habla con el líder de tu grupo pequeño sobre cómo puedes trabajar para ser un buen oyente y apoyar a esa persona para que puedas hacer brillar la luz hacia ella.