Su Nombre es JesúsMuestra

Su nombre es Jesús

por Rocky Fleming

Día 3: Jesús es Totalmente Único

"Yo conozco a los hombres, y os digo que Jesucristo no es un simple hombre, sino que no hay término posible de comparación entre Él y cualquier otra persona en el mundo. Alejandro, César, Carlomagno y yo hemos fundado imperios. Pero, ¿en qué basamos la creación de nuestro genio? A la fuerza. Jesucristo fundó su imperio sobre el amor; y en esta hora millones de hombres morirían por Él". Napoleón Bonaparte

"No hay término posible de comparación", son las palabras de un hombre que admiraba a Jesús. ¿Fue Napoleón un seguidor de Cristo? No hay nada seguro que diga que lo era o no lo era, pero seguro que estaba impresionado con Él. Tuvo que admitir que Jesús fue el hombre más especial que jamás haya caminado sobre la tierra con solo mirar los hechos y leer las palabras que se hablaron de Él. Esto se convierte en una herramienta poderosa cuando se defiende la deidad de Cristo, si una persona inteligente quiere conocer la verdad de los hechos.

Bonaparte conocía a los hombres. ¿Qué quiso decir al decir esto? Creo que estaba diciendo que conocía a los hombres y sus debilidades y fortalezas en las mejores y más difíciles condiciones. Ya sea en la paz o en un campo de batalla, un hombre valiente o uno cobarde, un hombre honesto o uno sinvergüenza, un hombre dedicado o un hombre no comprometido finalmente se revela. Lo que hay en un hombre eventualmente se manifestará, porque él los ha visto todos en todas las condiciones. Conocía a los hombres.

Debido a que conocía a los hombres, también conocía a los hombres que seguían a los líderes. Había líderes malos y buenos, y la forma en que los hombres seguían a un líder decía mucho sobre el líder. A veces los hombres morían por su líder si era un buen líder, pero rara vez morían por un mal líder. Por lo tanto, tenía que haber una razón convincente por la cual un grupo de hombres llamados discípulos de Cristo y que conocían mejor a Jesús vivirían para Él y morirían por Él como lo hicieron. Esto fue intrigante para Napoleón porque conocía a los hombres, y ver estas cosas acerca de Jesús a través de los ojos de esas personas le dijo mucho acerca de Jesús.

Napoleón fue lo suficientemente inteligente como para saber que ciertas cosas no pueden ser probadas excepto por el examen de las personas que hacen una afirmación. ¿Hay alguna razón por la que la gente mienta para convencer a alguien de algo? ¿Hay algún beneficio en instituir y proteger una mentira? ¿Qué estaría dispuesta a hacer una persona para proteger una mentira? Morir con la mentira y protegerla, o revelarla y luego vivir, eran cuestiones que Napoleón no podía reconciliar. Bonaparte conocía a los hombres, y sabía que alguien se quebraría bajo presión. Pero ninguno de los discípulos se quebró. Ésto le dijo mucho acerca de la verdad que estos hombres creían y enseñaban. También le dijo mucho acerca de Jesús. La única conclusión a la que pudo llegar fue que, con Jesús, "no hay término posible de comparación", y Jesús era quien decía ser.

Cuando se habla del señorío de Jesucristo y del hecho de Dios, simplemente pregúntale al escéptico inteligente si conoce a los hombres. Entonces, si entiende la naturaleza humana, entenderá que los hechos ofrecen más respuestas acerca de Jesús, si está dispuesto a mirarlos. Si está dispuesto a simplemente mirar los hechos, tendrá que concluir que hay algo más en Jesús que no entiende y estos hechos requerirán una decisión. Aquí es donde se hace evidente que hay más que saber acerca de este hombre llamado Jesús y el siguiente paso es conocerlo mejor. Sólo ahí podrán saber realmente qué creer o no creer.