Paz En Un Mundo AnsiosoMuestra

"Estén siempre alegres, oren sin cesar, den gracias a Dios en toda situación, porque esta es su voluntad para ustedes en Cristo Jesús" (1 Tesalonicenses 5:16-18).

Está científicamente comprobado que cuando damos gracias, se producen químicos en nuestro cerebro que combaten la ansiedad, la depresión y la preocupación. ¿Podría ser que Dios y la Biblia siempre supieron de esto, considerando nuestro versículo del día? ¡Absolutamente!

Siempre me gusta decir que hay una conexión entre la gracia de Dios y el decir gracias. ¡Incluso suenan igual! Ser agradecidos nos prepara para recibir más de la gracia de Dios, y posiciona nuestra mente para ser positivos y optimistas.

He encontrado que nuestra mente gravita naturalmente hacia lo negativo. ¡Es casi como si estuviéramos programados para eso, y definitivamente es parte de vivir en este mundo caído y tener carne y huesos! Pero esto puede cambiar practicando la gratitud y renovando nuestras mentes con la Palabra de Dios y orando al Padre.

¿No es verdad que es difícil estar preocupado y agradecido por las bendiciones de Dios al mismo tiempo? Te reto a pensar en tres cosas por las que estés agradecido la próxima vez que te sientas ansioso.

Meditar en la bondad de Dios y en las áreas en las que eres bendecido liberará Su gracia y optimismo sobre tu vida. ¡Es un secreto que el diablo no quiere que sepamos!

Recuerda, no tenemos que estar agradecidos por una situación, ¡pero podemos estar agradecidos en medio de una situación! Esto alterará nuestro estado de ánimo y perspectiva, y cambiará grandemente la condición de nuestra mente.

El resultado de cualquier situación depende de nuestro descanso en Dios, de la obediencia hacia Él y de Su soberanía. ¡Seamos agradecidos hoy por quien Él es y por todo lo que ha hecho! Declaremos con nuestra boca que nuestro futuro es bendito y que Él nos ha dado la victoria en TODAS LAS COSAS.