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Película de guerra aclamada por la crítica expone enseñanzas bíblicas importantes 

Tomó 11 años desarrollarla, pero la verdadera historia del héroe de la Segunda Guerra Mundial, Desmond Doss, finalmente llegó a la pantalla grande en el drama de 2016, Hasta el último hombre. A diferencia de las películas de guerra tradicionales, el personaje principal es un cristiano adventista del séptimo día quien sirvió como médico de combate a pesar de su compromiso inquebrantable con el pacifismo y el día de reposo.

Hasta el último hombre es un ejemplo de una película en la que la Biblia no es citada en una manera prominente, sino que sirve como el impulso de todo el argumento. Después de abrir con Isaías 40:28-31, la película nos lleva a la niñez de Desmond Doss cuando desarrolla una afinidad por los Diez Mandamientos (Éxodo 20:1-17); como se observa en un cartel enmarcado que cuelga en la pared de su casa. El sexto mandamiento: «No matarás», en especial parece atraer su atención debido a su experiencia personal con la violencia doméstica.

Ahora, de joven, Doss (representado por Andrew Garfield) elige enrolarse como médico en el Ejército de los Estados Unidos, aunque es elegible para aplazamiento. Se rehúsa a llevar un arma y en lugar de ello confía en una Biblia que lleva consigo en todo momento. Aunque es un acérrimo seguidor del Cuarto Mandamiento («Te acordarás del día de reposo para santificarlo»), Doss justifica su servicio los sábados (el día que los adventistas del séptimo día toman como día de reposo) porque «Cristo sanó en día de reposo», una creencia originada en Marcos 3:1-5.

Esta decisión hace de Doss el blanco de burlas y persecución directa dentro de su brigada. Los demás soldados lo consideran un peligro, y quieren que sea enviado a casa.

«¿Qué vas a hacer, golpearlos con tu Biblia?», le pregunta un oficial del Ejército burlonamente.

Pero Doss prueba ser más un héroe de lo que cualquiera esperaba. En la brutalmente violenta batalla de Okinawa, por sí solo rescata a 75 hombres que fueron lesionados durante la batalla. Sus acciones valientes ilustran la razón por la que más tarde se convirtió en la primera persona en objetar por razones de conciencia que recibió la Medalla de Honor. Los temas bíblicos del filme encontraron buena acogida entre las audiencias y los críticos. Hasta el último hombre recaudó $175 millones de dólares en taquilla y fue nominada a seis Óscares, ganando dos de ellos. 

En entrevista con The Tennessean, Daniel Weber, el director de comunicación de la Iglesia Adventista del Séptimo Día de América del Norte, explicó el significado del retrato de la película de dos principios bíblicos.

«(Doss) realmente sentía que necesitaba adherirse a esos mandamientos —dijo—. Sentía que necesitaba levantarse por su país y defender a su patria, pero al mismo tiempo salvar vidas, no tomarlas».