El Precioso Regalo Del PerdónMuestra

No podemos ganarnos el perdón

“Porque les digo a ustedes que si su justicia no supera la de los escribas y fariseos, no entrarán en el reino de los cielos" (Mateo 5:20 NBLA).

Nuestra situación como humanos es bastante desesperada, ya que la deuda con Dios lleva a la muerte eterna. Si queremos escapar de esta sentencia, tenemos que estar bien con Dios nuevamente. Pero no podemos “comprar” el perdón con dinero, sacrificios o cualquier otra cosa: toda la Tierra ya pertenece a Dios y Él no necesita nada de nosotros.

No podemos compensar nuestros pecados llevando vidas extremadamente correctas. Ni siquiera la elite religiosa en los tiempos de Jesús pudo alcanzar esta meta, tal como el versículo de hoy en Mateo 5 lo deja claro. Según los estándares humanos, eran irreprochables. Pero Jesús los compara con “… ¡sepulcros blanqueados! Por fuera lucen hermosos, pero por dentro están llenos de huesos de muertos y de toda inmundicia" (Mateo 23:27, NBLA).

El profeta Isaías dice que incluso nuestas buenas obras no son puras (Isaías 64:6). Sólo hacemos las cosas peores al estar contínuamente por debajo de los estándares de Dios. Esto queda confirmado por el Apóstol Pablo en su Carta a los Romanos, donde dice que ningún ser humano se justificará por las obras de la ley. La ley sólo nos muestra cuán pecadores realmente somos.

La conclusión es que no podemos estar bien con Dios nosotros mismos. Necesitamos una solución “desde fuera”. ¡Leamos más acerca de esto mañana!