Un matrimonio saludableMuestra

Vida espiritual

Llevar un matrimonio sin la ayuda de Papá Dios es un poco difícil, pues bajo cualquier presión, desacuerdo y sin bases sólidas que lo sostengan, cualquier prueba los puede separar.

El libro de Eclesiastés nos da una valiosa instrucción: “Más valen dos que uno, porque obtienen más fruto de su esfuerzo. Si caen, el uno levanta al otro. ¡Ay del que cae y no tiene quien lo levante! Si dos se acuestan juntos, entrarán en calor; uno solo ¿cómo va a calentarse? Uno solo puede ser vencido, pero dos pueden resistir. ¡La cuerda de tres hilos no se rompe fácilmente!” (4:9-12). Me gusta mucho este versículo, pues explica los beneficios de vivir en pareja, y concluye diciendo que una cuerda de tres hilos difícilmente se rompe. Esa cuerda simboliza a la pareja y el tercer hilo es Jesús.

Hoy, haz que ese tercer hilo sea el centro de tu hogar, permítele ser la roca firme que los sostenga y los haga indestructibles. Oren en pareja y cada día consagren su hogar a Papá Dios.

Tu amiga,

Carol Elam.