Movilízate: Aplica La Palabra A Tu VidaMuestra

“Escrituras que Dios ha demostrado en mi vida”

Me di cuenta que necesito probar que el versículo es verdad en mi vida, para recordar las escrituras que estoy memorizando. Debo hacer lo que la Palabra dice, para protegerme de ser simplemente un oidor y tan solo citar la palabra. Al utilizar el proceso de meditación como mi punto de partida, comienzo a orar y preguntar a Dios para usar el versículo en mis circunstancias diarias. Le pido que abra mis ojos a las oportunidades de aplicar los versículos memorizados en conversaciones, desafíos y aún en mi vida milagrosa. Al mirar de cerca el versículo, podría preguntarme cosas como:

¿Hay un pecado que confesar?

¿Hay una acción a seguir?

¿Hay un mandamiento para obedecer?

¿Hay una promesa que reclamar? 

Entonces comienzo a registrar, cómo Dios demostró su Palabra a través de versículos específicos. Mantengo una lista en mi computadora, titulada “Escrituras que Dios ha demostrado en mi vida”.

Finalmente, busco oportunidades para compartir estas experiencias de demostrar la Palabra, con otros. Demostrar la Palabra es un acto intencional de la voluntad. Se escoge para pensar, hablar, y caminar en el camino de la verdad. Demostrar la verdad no es algo que sucede por accidente, pero sí, con disciplina y diligencia.

Descubrí un versículo que revolucionó mi actitud y espero que haga lo mismo contigo, Proverbios 15:15.  La semana que memorizaba y meditaba en este versículo, volaba a California a dar una conferencia. La mañana que mi avión iba a decolar, llegue al aeropuerto dos horas más temprano para hacer todo el proceso de seguridad aeroportuaria con suficiente anticipación. Entregué mi equipaje y fui a la línea de seguridad con facilidad. ¡Parecía que tendría un gran día!

Al llegar a la sala de espera,  vi en la puerta de salida del vuelo, la palabra “cancelado”, que se iluminaba en el mostrador de registro. La sala de espera estaba vacía y mi primer instinto fue entrar en pánico y comenzar un día realmente malo. El Espíritu Santo me tocó el hombro y las palabras de Proverbios 15:15 vinieron a mi mente. Reí ruidosamente y miré alrededor para ver si alguien me había visto. 

Dios estaba detrás de algo. Me llamaba a probar su Palabra y ver si era verdad. Así que tomé el desafío y me dispuse a probar su Palabra. En ese momento, decidí tener un corazón agradecido y mirar qué me podría aguardar.

Después de estar en fila por alrededor de 30 minutos, y encontrarme repasando las verdades de Proverbios 15:15, me di cuenta que todos los vuelos a Dallas se cancelaron por el mal tiempo y mi itinerario incluía una parada en Dallas para abordar el vuelo a Oakland. Mientras avanzaba al mostrador, salude a la señorita con una sonrisa, porque había elegido estar gozosa.