Las Pruebas Nos FortalecenMuestra

La Iglesia, fortalecida por las pruebas

“Y no solo esto, sino que también nos gloriamos en las tribulaciones, sabiendo que la tribulación produce paciencia” (Romanos 5:3).

Pablo, en su carta a los romanos, alienta a la Iglesia a soportar las pruebas. Pablo era un experimentado en la frustración, en el rechazo, entre otras cosas, y sabía muy bien que el ejercicio de la paciencia les ayudaría a enfrentar las diversas dificultades. En medio de las tribulaciones,debemos aprender a adorar a Dios y a perdonar a quienes nos hacen algún tipo de mal. Debemos aprender a levantar un aleluya, a leer la Biblia, a orar, y debemos hacerlo en todo tiempo porque la paciencia es la disciplina que nos llevará más allá de lo que podemos entender y nos librará de la frustración. Dios nos llenará de su paz, su gozo, su sanidad, su poder, y hará un milagro en nuestra vida, familia y matrimonio.

En la Nueva Versión Internacional Romanos 5:3 usa otra palabra en lugar de la palabra paciencia: “Y no solo en esto, sino también en nuestros sufrimientos, porque sabemos que el sufrimiento produce perseverancia”.

Notamos que la palabra paciencia también se puede traducir como perseverancia, porque yo puedo ser paciente por diez minutos, una hora, un mes. Pero, la paciencia es perseverancia cuando la fe es probada por meses o años, para que seamos fortalecidos en la medida que podemos perseverar, y para seguir en el carril que Dios nos puso.

En Santiago 1:2-3 la Palabra de Dios dice: “Hermanos míos, tened por sumo gozo cuando os halléis en diversas pruebas, sabiendo que la prueba de vuestra fe produce paciencia".

No hay otra cosa en la vida que produzca paciencia, sino la tribulación. Al pedir paciencia pedimos pruebas, tribulación, y por eso nos dice que debemos gloriarnos en la tribulación, porque la tribulación nos fortalecerá el alma y el espíritu, porque sabemos que esa tribulación no es mayor de lo que Cristo es en nuestra vida. La tribulación no nos aplastará, sino que nos levantará y esto no significa que va a dar gusto, no significa que no costará algo, pero cuando pagamos el precio, la paciencia evidenciará la firmeza y la fortaleza de nuestra fe.

En medio de las pruebas Dios nos alienta a perseverar, aun cuando no tenemos fuerzas, porque la perseverancia es la cualidad que nos mantiene firmes, es la buena batalla de la fe.

Oración: Señor, añade perseverancia y paciencia a mi camino, fortalece mi alma y mi espíritu, lléname de tu paz, gozo, sanidad,poder, y obra un milagro en mi vida, familia y matrimonio. Amén.