¿Por Qué Ir a La Iglesia?Muestra

La iglesia es un lugar para adorar.

“¡Aleluya! Daré gracias al Señor con todo mi corazón,
En la compañía de los rectos y en la congregación” (Salmos 111:1 NBLA).

Los servicios de la iglesia son excelentes oportunidades para adorar juntos. Como dice Stuart Townend en su canción basada en el Salmo 133: "Con una voz cantaremos al Señor, y con un sólo corazón viviremos su palabra". Cantar juntos, alabar a Dios con nuestras voces y música, es una excelente manera de expresar nuestro agradecimiento y nuestro amor hacia nuestro Padre Celestial. ¡Él es digno de nuestra alabanza!

El libro de los Salmos es una colección de canciones. Algunas son muy personales, pero muchas están destinadas a ser cantadas "en compañía de los rectos, en la congregación". A lo largo de los siglos, los cristianos han cantado estas antiguas canciones y han compuesto nuevas basadas en sus propias experiencias con Dios.

Adorar juntos nos ayuda a enfocarnos en las grandes y permanentes verdades objetivas sobre Dios, a mirar más allá de nuestras dificultades o alegrías personales temporales. Un día, podremos unirnos a la "gran multitud, que nadie podía contar, de todas las naciones, tribus, pueblos y lenguas" para cantar la alabanza de Dios: "¡La bendición, la gloria, la sabiduría, la acción de gracias, el honor, el poder y la fortaleza sean a nuestro Dios por los siglos de los siglos!" (Apocalipsis 7:9,12 NBLA).

¡Hasta entonces, podemos "practicar" juntos en la iglesia!