A Dios le importa

Podemos orar por cualquier cosa. Como dice Christine Caine: “Si te importa a ti, a Dios le importa". Si es algo que nos importa o nos preocupa, es algo por lo que podemos orar.

Pablo nos anima en Filipenses 4:6-7, "Por nada estén afanosos; antes bien, en todo, mediante oración y súplica con acción de gracias, sean dadas a conocer sus peticiones delante de Dios. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará sus corazones y sus mentes en Cristo Jesús" (CSSB).

¿Por qué podemos orar? La respuesta de Pablo es clara: ¡por todo! Nada es demasiado pequeño cuando se trata de Dios. Y aunque puede parecer que esas palabras ("Por nada estén afanosos") no son solidarias ante las dificultades que enfrentemos, es importante tener en cuenta que Pablo las escribió cuando estaba en la cárcel.

No nos estaba diciendo que convirtiéramos en nuestro mantra la frase "No te preocupes, sé feliz", como la canción en inglés. Ignorar o minimizar la realidad de nuestras circunstancias sería irresponsable. Pero hay un camino para que experimentemos la paz y el poder de Dios en medio de nuestra preocupación y nuestro estrés, y por eso Pablo nos anima a que le presentemos nuestras peticiones a Dios. Sí, Dios está involucrado activamente en el cuidado de todo el universo y de los principales problemas del mundo, pero nuestro Padre Celestial está igual de involucrado con los detalles de la vida de sus hijos, y preocupado por ellos: nuestro trabajo, nuestras relaciones, nuestros sentimientos y temores y nuestras actividades cotidianas.

Dios te ve, Dios te conoce, y Dios realmente se preocupa por ti.

Si a ti te importa algo, a Dios le importa. ¡Así que, ora por ello!

Oración

Padre, gracias porque te preocupas por alimentar a los pájaros y vestir a los lirios, y eso es solo una fracción de lo mucho que te preocupas por los detalles de mi vida y las cosas que hay en mi corazón. Hoy, pongo delante de ti las cosas que me preocupan. Por favor, muestra tu sabiduría, presencia y poder en esas áreas. Y te pido que, así como te preocupas por las cosas que me importan, moldees mi atención y mi afecto hacia las cosas que te importan a ti. Que tu Reino venga a la tierra, como es en el cielo. Amen".