En La Búsqueda De La Voluntad De DiosMuestra

La voluntad de Dios: Una Perspectiva Completa

En Romanos 12:2, la Palabra de Dios nos asegura: "No os conforméis a este siglo, sino transformaos mediante la renovación de vuestra mente, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta."

Este versículo revela que la voluntad de Dios es buena, aceptable y perfecta. No hay indicación alguna de que el plan del Señor para ti sea insoportable o perjudicial. Más bien, lo que Él tiene previsto es "bueno, aceptable y perfecto". Tres conceptos que deberían infundirnos paz y confianza.

Vamos a profundizar en cada uno de ellos:

Primero, la voluntad de Dios es buena. Este plan es moralmente honorable, excelente y beneficioso para ti. Aunque en un principio pueda no parecer así, debemos recordar que Dios promete que todas las cosas cooperarán para nuestro bien para aquellos que le amamos (Romanos 8:28). El Padre cuida con esmero lo que permite en nuestras vidas, porque Él mismo es bueno (Salmo 145:9) Por más doloroso o dificil que sea la situación, o lo que nos afecte, bien sea en el área de la salud. Dios asegura que si le amamos, todas estas cosas nos ayudan; puede que desde este lado de la ecuación no logremos comprender del todo, en qué sentido nos ayudará, incluso la enfermedad o la muerte; pero cuando le veamos cara a cara, todo quedará absolutamente claro (1 Cor. 12:13)

En segundo lugar, el plan del Señor para ti es aceptable. No solo es agradable a Dios, sino que también satisface tus necesidades. Una vez que recibes a Cristo como tu Salvador, eres aceptado ante el Padre para siempre. Con la guía del Espíritu Santo y la Palabra de Dios, puedes vivir de una manera que agrada al Señor. Filipenses 2:13 afirma que Dios obra en ti tanto el querer como el hacer, para su buena voluntad.

Finalmente, la voluntad de Dios para ti es perfecta. Aunque la palabra "perfecto" puede resultar intimidante, su significado en griego, "teleios", se traduce mejor como "terminado; llevado a la madurez; habilitado para alcanzar la meta; sin necesitar nada para estar completo". Dios no tiene planes a medias, especialmente para sus hijos. Aunque quizás no conozcas Su plan completo, Él lo sabe y lo llevará a su cumplimiento absoluto, lo anterior debería darnos tranquilidad.

La Palabra de Dios te asegura que la voluntad del Señor es buena, aceptable y perfecta. En otras palabras, indica, que nuestra parte es poder confiar y descansar en esa voluntad que Dios tiene diseñada para nosotros. Descansa en la seguridad de que este plan amoroso y cuidadoso no solo está a tu alcance, sino que Dios está comprometido a hacerlo realidad en tu vida mientras confías en Él.

Recuerda, ya se nos ha dicho lo que debemos saber, nuestra parte es creer, confiar y esperar en Él.

¿Qué es lo más intimidante o dificil que nos pueda pasar? Que en un abrir y cerrar de ojos, nuestra espetanza haya sido cumplida y le veamos cara a cara, tal cual Él Es.