Permaneciendo en NavidadMuestra

"Permaneciendo en la Navidad: Pensamientos diarios de Adviento" por Bryan Craig

"Y ahora, Israel, ¿qué pide de ti el Señor tu Dios, sino que temas al Señor tu Dios, que andes en todos sus caminos, que lo ames, que sirvas al Señor tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma, y que guardes los mandamientos y estatutos del Señor que yo te ordeno hoy para tu bien?" (Deuteronomio 10:12-13).

En nuestro camino hacia Jesús, estamos dedicando tiempo a entender el estado del mundo antes de la venida de Jesús. Todas esas interacciones entre Dios y el hombre en el Antiguo Testamento son muy importantes para entender el corazón de Dios hacia nosotros. Hemos leído en los últimos días acerca de las varias veces que Dios rescató a Su pueblo y mostró Su amor. ¿Qué pide a cambio? Solo que lo amemos de vuelta. ¿Es tan difícil?

En Mateo 22:37, cuando se le preguntó a Jesús cuál era el mandamiento más grande, citó este versículo: amar a Dios con todo nuestro corazón y con toda nuestra alma. Si no estamos amando a Dios, debe ser porque no sabemos cuánto nos ama.

APLICACIÓN: Examina tu corazón para ver si amas a Dios. Las Escrituras dicen que demostramos que amamos a Dios al obedecer Sus mandamientos. ¿Eres obediente a Dios? Si tu corazón se ha endurecido, pídele que te dé un corazón nuevo y que Su Espíritu te llene de Su amor.