NASCAR y la BibliaMuestra

“Un pasaje de Paul ayuda a Blake Koch a prepararse para un momento cargado de presión”.

2016 Las 300 de Drive For Safety: Chicagoland Speedway (17 de septiembre, 2016).

De camino a la temporada del 2016, Blake Koch nunca terminó más alto que un 17 en las series Xfinity de NASCAR. De hecho, su carrera hasta ese punto había sido una aventura corriendo en las tres mayores divisiones por no menos de quince equipos diferentes.

Pero Koch no se daría por vencido en su sueño de volverse un corredor de una competencia de autos en serie, y con un contrato renovado de Kaulig Racing, estaba a la orilla de un año de avances. Koch estaba especialmente agradecido por la implementación de un nuevo “Chasis” que restaura los puntos de soporte y le da a los 12 corredores la misma oportunidad de correr por el campeonato.

Aun así, Koch fue considerado poco probable para llegar a los finales. Así que al prepararse para las 300 de Drive For Safety en la Chicagoland Speedway, su lugar dentro de los primeros 12 fue un avance sorpresivo. Todo lo que Koch tenía que hacer era mantener esa posición por una carrera más para asegurar su lugar entre los equipos de la serie elite.

Al acumularse la presión, Koch necesitaba encontrar una forma de liberar algo de estrés. Sus instintos le dijeron que lo trabajara, literalmente. 

“A veces quedo tan atrapado en entrenar tan duro y me preocupo sobre lo que puedo hacer para ser un mejor corredor,” dijo Koch al Diario Cristiano del Deporte. “Hacia el final del año, cuando trataba de llegar a los playoffs y había chicos respirándome al oído, sentí que tenía que trabajar y entrenar tan duro física y mentalmente.”

Fue ahí cuando tomó su Biblia y encontró un versículo que le dio una perspectiva diferente de la situación.

“El entrenamiento físico es bueno, pero entrenarse en la sumisión a Dios es mucho mejor, porque promete beneficios en esta vida y en la vida que viene”, (1 Timoteo 4:8).

“Ese verso me recordó poner a Dios ante todas esas cosas,” explico Koch. “Creo que eso es lo que en realidad me ayudó a lidiar con la presión”.

Koch terminó en el lugar 15 en Chicago y solidificó su lugar en los 12 carros finales en avanzar al “Chase”. Luego avanzó a la ronda de ocho antes de perder el Campeonato Cuatro (y la oportunidad de ganar el título de la serie en la Phoenix International Raceway) por sólo 4 puntos (o cuatro posiciones en la pista). Al final de la temporada, Koch ganó un séptimo lugar de mejor carrera en los puntos definidos y su mejor temporada con 5 carreras en las cuales terminó en el top 5.

“Tuve muchas altas y bajas,” agregó Koch. “Ha habido crecimiento para mí como corredor y también en lo espiritual. Me conecté con el grupo correcto de amigos y eso comenzó desde el principio. A veces parece que las cosas no siempre van bien, pero cuando veo atrás, en realidad amo como ha pasado todo.”