Pascua: El cielo sabeMuestra

El cielo sabe cómo consolarnos

¿Alguna vez te has encontrado en un lugar desconocido, rodeado de extraños y nuevas costumbres? Puede ser una experiencia desorientadora y abrumadora. En esos momentos, a menudo buscamos algo familiar, algo a lo que podamos aferrarnos y encontrar consuelo. Tal vez sea la vista de una cara familiar en una habitación llena de gente o el sonido de una vieja canción en la radio. Tal vez sea el sabor de una comida favorita o el olor de un aroma particular. Sea lo que sea, nos aferramos a él porque encontramos consuelo allí.

Esto es lo que Dios hace por nosotros. Él nos ve en la incertidumbre y proporciona comodidad y estabilidad, tal como lo puede hacer la cara familiar de un amigo en una fiesta. Él conoce nuestras necesidades y deseos; además, siempre está dispuesto a satisfacerlos. Esto fue cierto para mi esposa y para mí cuando nos embarcamos en un viaje misionero en Asia. La gente que conocimos fue maravillosa. La comida era estupenda. Pero a medida que pasaban las semanas, comenzamos a sentirnos un poco perdidos en una tierra extranjera. Anhelábamos algo familiar, algo que nos hiciera sentir como en casa.

Fue entonces cuando preguntamos por un restaurante estadounidense y nos dirigieron a Kenny Roger Chicken Roasters. En el momento en que entramos, el aroma de macarrones con queso nos saludó. Sabíamos que estábamos en el lugar correcto. Mientras disfrutábamos de nuestro pollo y pan de maíz, sentimos la comodidad y la familiaridad que nos habíamos estado perdiendo. Era como si Dios nos hubiera guiado allí para recordarnos que no importa a dónde vayamos, Él está con nosotros.

Pero no solo en tierras extranjeras buscamos comodidad y familiaridad, también lo hacemos en nuestra vida cotidiana. Vamos a la misma cafetería todas las mañanas. Tenemos nuestra silla favorita y escuchamos la misma música. Tales cosas nos dan una sensación de estabilidad y rutina que anhelamos. Sin embargo, la fuente última de consuelo y estabilidad es Dios. Él es quien nos provee, nos guía a través de lo desconocido y nos da un sentido de pertenencia. Él hizo esto por los israelitas en el desierto cuando proporcionó maná, agua, sombra, calor y mucho más.

¿Confías en ti mismo o confías en la provisión de Dios? Mantente abierto a las bendiciones inesperadas que Él tiene reservadas para ti. Entonces, verás Su poder y amor que obra en y a través de ti.