Más espeso que el aguaMuestra

Piensa en tu último proyecto grupal. Probablemente ya hayas participado en algunos, seguro unos fueron geniales y otros, no tanto. Los mejores grupos eran aquellos en los que la gente trabajaba junta, asumía su papel y buscaba la manera de ayudarse mutuamente. Así funciona también la familia. En tu familia, vale la pena trabajar por la unidad. Para cooperar. Trabajar juntos, incluso cuando es difícil. Cuando lo haces, estás viviendo algo que es muy importante para Dios: ¡la unidad!

Hoy, busca una oportunidad para unir a tu familia. Jueguen un juego, compartan una conversación o realicen una actividad juntos. Sea lo que sea, busca una oportunidad para crear unidad en tu familia de la mejor manera posible.