Venciendo en La PérdidaMuestra

ATRAVESANDO EL LUTO EN SU PRESENCIA

Las pérdidas pueden llevarte a un estado emocional equivocado, lleno de rencor, odio, resentimiento y cuestionamiento; que pueden hundirte en lo oscuro. Si estás en ese ciclo es tiempo de salir de ahí, ese no es el lugar correcto. Si en algún momento has pasado por el dolor de pecho y sientes como que se achica el corazón con punzadas, no te desesperes el síntoma de “retener” llegó, entonces es el tiempo de “dejarlo ir”. Todo aquello que es quitado duele, Perdiste a tu hijo(a), padres, compañía, trabajo, esposo, sueños, inversiones; todo duele porque es real. Sin embargo el Señor anhela que el luto sea atravesado por el camino indicado; Su presencia y por Su Palabra.

El Rey David lo sabía muy bien, él tomó la mejor ruta: buscar la presencia de Dios. Sabía que el dolor le producía punzadas grandes llegando a someterlo a lo oscuro de la depresión sin luz ni salida, entonces clamó (gritó) desde lo profundo de su ser.

Cuando me tocó aceptar la voluntad de mi Señor, de que mi madre tenia que partir con Él, me hizo verme vulnerable al punto de gritar en mi habitación desde mis entrañas y decir; ESTÁ BIEN PADRE, ME RINDO, HAZ TU VOLUNTAD, NO VOY A LUCHAR CONTIGO, LO ACEPTO. Desde ese momento en mi espíritu se “desprendió” ese cordón umbilical que me unía a mi madre y no me dejaba ser libre, se desligó poderosamente mi alma, se llenó de paz con una sonrisa sobrenatural. Es tiempo de cortar con eso que no te da libertad y te ata a la negación, YA ES TIEMPO, ENTRÉGALA.