21 Días De Filiación: Dios, Familia e IglesiaMuestra

EL HIJO IDEAL

El hijo “ideal” se encuentra también en la parábola del hijo pródigo. En el relato, propiamente dicho, el hijo ideal tiene una actitud opuesta a la del rebelde y religioso. Ambos hijos sufren la orfandad, pero Jesús mismo, al contar la historia, deja entender que Él mismo sería el hijo ideal.

Cuando es bautizado, el Padre dice: “¡Este es mi hijo amado!”. Esto demuestra que Jesús es el tipo perfecto de referencia sobre la filiación. Jesús es el ejemplo máximo de filiación que debemos tener como norma y práctica. El hijo ideal es Jesús. Él tuvo una vida de soledad dónde buscó relacionarse con Su Padre constantemente. No escatimó esfuerzos para hacerlo. La Biblia dice que Jesús se tomaba en serio lo de vivir en secreto con Su Padre. Por eso Él mismo alentó la práctica del secreto e incluso dijo que quien lo hiciera sería recompensado por el Padre. El hijo ideal es cercano, íntimo, obediente, sabe honrar y respetar el legado del Padre.

Hay tantos estímulos para que actuemos por orgullo, pero sólo podremos defendernos de él si decidimos ser ovejas del redil del Señor. No es de extrañar que antes de la historia del hijo pródigo en Lucas 15 venga la historia de la oveja perdida. Un hijo perdido es aquel que camina en dos extremos destructivos ─ rebeldía o religiosidad. Huye de todo eso, desarrolla tu corazón de hijo y no permitas que nada ni nadie te aleje de los brazos del Padre.