Reformulando La MisiónMuestra

Jesús Estratégicamente Global

Es indiscutible que la razón principal por la que servimos y exaltamos a Jesús es porque mediante su gracia nos obsequió la salvación personal. No obstante, no tenemos que dejar de observar otra consecuencia de su vida en la Tierra: Jesús no solamente nos dio la salvación sino que también fue el fundador de un movimiento tan potente que llevaría esa salvación hasta los confines de la Tierra. Por ello, tú y yo hoy disfrutamos de su gracia y formamos parte de su Iglesia global. Nosotros, como sus seguidores, tenemos también esa tarea, la de continuar el trabajo que Jesús mismo comenzó en su vida en este mundo. Ese fue su mandato para nosotros, para aquel movimiento, para aquella Iglesia que se iniciaría a partir de Él. Si no comprendemos cómo fue que Jesús desarrolló su misión, caeremos en el error de perdernos la esencia de nuestro propósito o misión y viviremos vidas que no sean relevantes para cumplir esa tarea.

“...como el Padre me envió a mí, así yo los envío a ustedes” (Juan 20:21). Quiero mostrarte el enfoque estratégico de Jesús para su Iglesia. Él actuaba con intencionalidad. Jesús nos reveló la pasión de Dios para que el mundo entero sea evangelizado. También Él mismo fue el precursor de aquel movimiento multiplicador que llevaría a cabo esta evangelización. Primero, Jesús se ocupó del pueblo judío. Aunque Dios preparó al pueblo judio para recibir su evangelio, aun así rechazaron y no entendieron sino que trataron con hostilidad y maldad al mismo hijo de Dios, al verbo hecho carne. Lo interesante es que, de igual manera, un remanente del pueblo judio sí lo recibió y creyó en el Mesías. Por esto, aquel deseo inicial de Dios de que su pueblo escogido sea portador de la luz para todas las naciones se estaba haciendo realidad, por aquella estratégica inversión que Jesús estaba haciendo para formar a sus discípulos judíos y convertirlos en un movimiento misionero.

Al enviar a sus doce discípulos “a las ovejas perdidas de la casa de Israel”, Jesús estaba mostrándoles el corazón de la misión de Dios. Claro que aclarando que aquel pedido fue exclusivo al pueblo escogido por Dios “no ir a los gentiles” (Mateo 10:5-6). Recién después iba a enviar a los 70 “a todo pueblo” (Lucas 10:1). Por último, vemos en la Biblia que fue muy obvio el interés de Jesús por los gentiles. Notamos en los evangelios que Él tenía una profunda preocupación por aquellas personas que no eran judías. Son varias las ocasiones en donde vemos a Jesús acercarse intencionalmente a los gentiles, a los despreciados por los judios. Esto también es revelador, ya que estudiando sus enseñanzas durante su ministerio, Jesús siempre hacía énfasis en aquella gran pasión que Dios tenía por todo el mundo, por lo que la gran comisión no es solo un agregado al final de sus enseñanzas. ¿En qué otros pasajes piensas que Jesús demostró pasión por los gentiles?