El primer gran avivamiento

Billy Graham dijo que el Primer Gran Avivamiento no fue el que causo la resurrección de Jesús (aunque es el más importante), sino que en realidad fue el Avivamiento de Nínive.

Cuando Dios mando a Jonás a Nínive, para que les dijera que su maldad había llegado hasta Su presencia, sabemos que Jonás no fue obediente y de hecho, se fue lo más lejos que podía. Muchos de nosotros tenemos un llamado para generar un avivamiento en el entorno en el que nos movemos, pero somos como Jonás. Nos da pereza, nos da miedo, nos intimida a veces hablar de Jesús y ser luz. ¡No nos damos cuenta de que Dios puede usar un “sí” de nosotros para cambiar familias y ciudades enteras!

¿Estás huyendo del avivamiento que Dios quiere generar a través de tu vida? ¿Prefieres una vida cómoda o quieres vivir una vida de FE? Todos los días escogemos huir de Dios o hacer Su voluntad.

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• 3 días tardó Jonás en la barriga del enorme pez.
• 3 días duro Jesús reclamando las llaves de la vida eterna para salvarnos.

Las similitudes en la historia de Jonás con la de Jesús son alarmantes (aunque Jesús nunca huyo de Dios). Son historias paralelas de 2 avivamientos que Dios ocasionó por amor a la humanidad.

- Jonás 3:4-10

Desde el más grande hasta el más pequeño, TODOS se arrepintieron de sus pecados y volvieron a Dios. ¡Esto es un avivamiento! Cuando un corazón se arrepiente y vuelve a los pies de Dios.

Es impresionante imaginarse toda una ciudad, incluyendo a sus gobernantes y autoridades, TODOS, buscando el perdón de Dios. Seamos valientes y busquemos que los lugares más oscuros de nuestro entorno conozcan al Dios que ya los perdonó. Dios es experto en redimir los casos más complicados y Él lo quiere hacer con las personas que te rodean. NO IGNORES EL LLAMADO DE DIOS. Él te dice todos los días a través de su Espíritu Santo: “Ve, habla, cuéntales todo lo que has vivido de mi mano, y verás que ellos vendrán a Mí”.