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La preexistencia de Jesús -Él es eterno

“… v. 1 En el principio ya existía el Verbo, y el Verbo estaba con Dios, y el Verbo era Dios. v. 2 Él estaba con Dios en el principio” .

En estos versículos vemos que Juan nos dice que “algo, alguien” era el Verbo, y que además habitaba con Dios y era Dios. Pero, ¿quién es el verbo? Mira lo que dice Juan más adelante en el 1:14:

“Y el VERBO se hizo carne y habitó entre nosotros” .

Juan 1:14 identifica al Verbo como la persona de Jesús. El propósito del Evangelio de Juan es destacar la divinidad de Cristo, y por tanto Juan comienza su relato estableciendo desde el inicio la igualdad de Jesús con la persona de Dios.

Podrías preguntarte, ¿si el Verbo se refiere a Jesús, por qué el autor no sólo escribió Jesús en vez de Verbo? Este detalle es muy importante, más bien es central para lo que estamos meditando este día. Es importante que no perdamos de vista dos cosas: la primera que cuando Juan escribió no lo hizo en español, ni inglés, ni siquiera en latín; lo hizo en griego (antiguo). La segunda, cuando Juan escribió, lo hizo con un público en mente.

La palabra “Verbo” en el lenguaje original en que Juan escribió es “Logos”. Juan usó la palabra “Logos” por un lado, porque en griego esta significa: “la Palabra” y para los judíos “la Palabra” era un vocablo que podía representar a Dios.

Por otro lado, “el logos” para los filósofos de la época era el principio o la fuerza que gobernaba el universo. Los filósofos griegos creían que había un orden cósmico detrás del orden material. Muchos de estos filósofos dedicaron sus estudios y su vida enteras a querer entender el universo y encontrar cuál era ese principio (arché) de todo: unos dijeron que era el fuego, el agua, el aire, y así continuaron en su incansable búsqueda.

Juan, al usar la palabra “logos” lo está haciendo con toda intencionalidad para señalarle a los judíos que Jesús, es Dios; y a los filósofos, que su búsqueda llegó a su fin, que ese orden cósmico que lo gobierna todo, es Jesús quien es Dios, quien creó todo lo que existe y lo gobierna todo.

Juan en estos versículos está declarando que: el mundo no es un absurdo, hay un creador y por lo tanto hay un propósito y un orden detrás de todo.