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¿Qué áreas de tu devoción a Dios has dejado de ejercitar?
Medita en lo siguiente:
Deja de compartir tu fe y te va a costar más compartirla cada vez…
Deja de congregarte y te va a costar más nuevamente hacerlo…
Si tú le preguntas a una persona que se ha alejado de la iglesia: ¿Qué pasó? Te dirá que no estaba orando, ni leyendo su Biblia o te dirá que su trabajo, situaciones y quehaceres le ocuparon su tiempo o le impidieron llegar. Y luego cuando quiso hacerlo, le costó mucho más. Entonces, ya no lleva el ritmo.
Ejercicio…
El ejercicio físico sirve para algo…no es malo, es bueno hacer ejercicio; pero el ejercicio espiritual es mejor.
Aunque el ejercicio físico es bueno, es bastante limitado porque cuando te ejercitas físicamente, parte de tu cuerpo se desarrolla, pero no tus principios, ni tu alma, ni tus convicciones. Cuando te ejercitas en la piedad el hombre se ejercita en todas las áreas.
Nunca llegaremos a ninguna parte en la vida sin disciplina, y doblemente en asuntos espirituales.
Entonces, te invito al Gimnasio de Dios: ¡Algo de dolor y gran ganancia!
Para comenzar con nuestra rutina de ejercicios espirituales, respira profundo, pon tus brazos en tu cintura, mira de un lado a otro; ahora hacia arriba y hacia abajo y comencemos con el primero de 10 ejercicios de piedad...
10 ejercicios de Piedad
#1 La disciplina de la pureza
La sensualidad e inmoralidad es el mayor obstáculo para la piedad entre los cristianos. La experiencia sexual de David con Betsabé y el estilo de vida promiscuo e inmoral de Jezabel no sólo deben instruirnos sino asustarnos hasta alcanzar nuestra propia sensualidad. Llénate de la Palabra de Dios: memoriza pasajes como 1 Tesalonicenses 4:3–8, Job 31:1, Proverbios 6:27, Efesios 5:3–7 y 2 Timoteo 2:22.
Encuentra a alguien que te ayude a mantener tu alma fiel a Dios. Una mente pura es imposible si miras televisión y películas sin considerar su contenido, visitas sitios web pornográficos, o tienes conversaciones y citas impuras (1 Tes. 4:3–7).
Desarrolla la conciencia divina que sostuvo a José: “¿Cómo, pues, puedo hacer yo esta gran maldad y pecar contra Dios?” (Gén. 39:9).
Hoy decídete a bloquear, eliminar y dar la espalda a todo lo que implica impureza.
Acerca de este Plan
Aunque el ejercicio no es un tema agradable, todos tenemos muy claro que hacer ejercicio puede traernos algunos beneficios para nuestra salud. ¿Cuánto más si hacemos referencia al ejercicio espiritual? Te invito al gimnasio de Dios: ¡Algo de Dolor y Gran Ganancia!
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Nos gustaría agradecer a Iglesia Tabernáculo de Evangelización por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: https://www.iglesiatde.today/misletras-blog
