Nuestras Decisiones Muestra

Decisión #2 Jonás ora

Después de huir sucede algo muy curioso en la historia de Jonás: vino una tormenta a la barca donde iba escapando de la tarea que Dios le había encomendado.

Muchas veces me ha pasado igual, he tomado malas decisiones, desobedeciendo a Dios y viene la prueba, eso mismo le pasó a Jonás. Cuando estamos en tiempo de prueba tenemos que tomar ciertas decisiones; podemos escoger una mala actitud y renegar; ó podemos orar y pedirle a Dios auxilio, perdón y nueva dirección para nuestra vida.

Jonás sabía que él era el problema, entendía que su desobediencia estaba causando esa fuerte tormenta y que probablemente iban a morir muchas personas si no tomaba una decisión. Él pensó que si lo tiraban de la barca todo iba a mejorar y él pensaba que su vida allí debía de terminar, lo que no sabía es que Dios tendría un encuentro con él en la barriga de un gran pez. Así son las tormentas, siempre nos preparan para un encuentro con Dios. Jonás en la barriga del pez toma una decisión: la oración.

¿Es la oración tu mejor decisión en medio del caos?

Podemos definir la oración como una conversación íntima con Dios. A lo largo de la Biblia hay muchos ejemplos acerca de la oración, pero me impresiona tanto como Jonás en medio de su desobediencia y caos decide orar. Sé que son desesperadamente muchas veces las situaciones en las que estamos, no vemos salidas tal vez hoy, físicamente no estas dentro de un pez, pero si tal vez encerrado en la duda, miedos, inseguridades, desesperación, pero en medio de todo esto toma la decisión de orar.

De la oración de Jonás aprendemos dos lecciones increíbles:

#1 Orar en medio del caos.

#2 Orar por gratitud.

Quiero terminar este día con esta frase del Ps Yonggi Cho:

«Nuestro problema es que hemos pensado en la oración, hemos leído acerca de la oración e incluso hemos aprendido con respecto a la oración; pero no hemos orado. Ahora es tiempo de comprender que la oración es la fuente del poder».