Plenitud De VidaEjemplo

Una Crisis Global

Muchas personas hoy en día experimentan niveles devastadores de dolor, soledad, ansiedad, depresión, uso de la pornografía y otros desafios. Muchos de nosotros luchamos y no sabemos cómo liberarnos, mucho menos como vivir una vida floreciente. Sin embargo, nuestras luchas no son imprevisibles; son señales que, cuando se responden, pueden allanar el camino hacia una vida plena.

Nosotros lo sabemos bien. Yo (Josh) durante años mientras crecía fui abusado sexualmente, y experimenté un dolor profundo debido a mi padre que era alcohólico y a una familia disfuncional. Cuando vine a Cristo, muchas cosas mejoraron hasta que mi dolor emocional irresoluto se apoderó de mí. Estaba enojado, exhausto y luchando por seguir adelante. Necesitaba la sanidad de Dios.

Yo (Ben) también experimenté profundo dolor, confusión y trauma en mis años de adolescencia. Experimenté el acoso escolar, la ira de mi padre, problemas de salud mental, una adicción a la pornografía, y eventualmente pensamientos suicidas.

Nuestras historias no son anormales. Después de más de 75 años de experiencia ministerial combinada, hemos visto tanto deterioro, relaciones poco saludables, dolor y adicción en todo el mundo. La iglesia está en crisis. Necesitamos un movimiento radical de Dios para sanar nuestro quebrantamiento y traer plenitud abundante.

Quizás te identifiques con nuestras historias y te hayas preguntado cómo curarte de tu dolor; cómo superar la ansiedad o ese problema al que sigues volviendo. O tal vez simplemente te has preguntado cómo prosperar verdaderamente en la vida y en tus relaciones con Dios y con los demás.

Este devocional de 7 días te ayudará a iniciar tu jornada. En él, combinamos nuestros años de investigación, los últimos hallazgos en la neurociencia y los principios bíblicos que Jesús ha usado en nuestras vidas y en miles de personas para darnos plenitud de vida.

Hoy, permitenos exhortarte a recordar que:

Jesús se preocupa por tu dolor: “Él Señor restaura a los de corazón quebrantado y cubre con vendas sus heridas.” Salmo 147:3 NVI

Jesús ha roto el poder del pecado en tu vida: “Él mismo cargó nuestros pecados sobre su cuerpo en la cruz, para que nosotros podamos estar muertos al pecado y vivir para lo que es recto. Por sus heridas, ustedes son sanados.” 1 Pedro 2:24 NTV

Jesús vino a traerte la vida verdadera: “Yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia.” Juan 10:10 NBV

Él tiene las llaves y el poder para curarte y liberarte. Tómate un tiempo para sentarte con Dios y contarle sobre tu dolor, ansiedades y luchas. Pídele que traiga sanidad y progreso en tu vida.

1. ¿Dónde necesitas experimentar la libertad de Dios en tu vida?

2. ¿Cómo crees que tu vida será diferente cuando estés sanando de esas dificultades y caminando liberado?

Para profundizar en el tema de hoy, busca Plenitud de Vida [Free to Thrive], de Josh McDowell y Ben Bennett, dondequiera que vendan libros.