Humilde De CorazónMuestra
"Mi Yugo, Tu Yugo"
Jesús nos dijo que recibiéramos su yugo, fácil y ligero de llevar. A través de estas palabras, Jesús nos enseña que la obediencia al Padre es su yugo; que si hacemos como Él, que si obedecemos como Él, vamos a tener paz.
Son muchas las ocasiones en que nos sentimos cansados y cargados; Jesús nos enseña que si nos rendimos en obediencia al Padre, vamos a poder descansar y ser libres de todo peso que nos abruma; porque será Él quien tome el control absoluto de todo, será Él quien se encargue, mientras nosotros nos rendimos en total dependencia y obediencia.
Él dependía totalmente del Padre; hablaba lo que el Padre le pedía que hablara, hacía todo lo que el Padre le decía que hiciera. Es ese yugo el que Él mismo nos pide que llevemos para que en todo cuanto vivamos tengamos paz y prosperidad; una paz y una prosperidad que para nada tiene que ver con estar libre de sufrimiento o dificultades, pero que al final de cada sufrimiento o adversidad vamos a poder testificar de la gloria manifestada en Cristo Jesús a través de nosotros; entonces, no habrá nada ni nadie que impida que su paz nos llene por completo.
"Mi yugo, tu yugo"; es el que Jesús llevó. Como hijos de Dios, tenemos la meta de parecernos a Jesús; Él es a quien buscamos imitar para poder agradar a nuestro Padre y la único forma de hacerlo es sometiéndonos en obediencia, incluso hasta perder la vida, como lo hizo Jesús aún sin que Él tuviera que hacerlo ni lo mereciera.
No significa que vamos a padecer lo que Él padeció en términos literales; ya Jesús lo hizo por nosotros, el Único que podía hacerlo; sin embargo, lo que significó su muerte para nosotros sí nos lleva a sufrir la muerte que necesitamos sufrir para poder vivir la vida en la que Él nos cimentó a través de su muerte y resurrección. Muerte a nuestro yo, al deseo de pecar, al deseo de hacer como nosotros queremos; porque hemos entendido quién es nuestro dueño, de quién dependemos y para quién vivimos; por quién fuimos perdonados y salvos, cómo sucedió y cuál es el propósito.
Escrituras
Acerca de este Plan
Lo que Jesús hizo cuando se despojó de su divinidad para hacerse hombre como nosotros, fue una clara manifestación de sometimiento ante la voluntad del Padre. No escatimó ser igual a Dios para sufrir como hombre la entrega inmerecida que padeció por nuestra desobediencia; Jesús, el único humilde de corazón, nuestro ejemplo para despojarnos de sí mismos y parecernos cada vez más a Él.
More
Nos gustaría agradecer a Marysela Ocampo O. por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: https://www.facebook.com/confiadosenJesucristo